Caso Pecci: En Paraguay acusan a mafia local | El Nuevo Siglo
Benjamín Fernández es jurista y exconstituyente paraguayo autor de más de 15 libros.
Cortesía
Lunes, 15 de Agosto de 2022
Redacción Política

El jurista y exconstituyente paraguayo Benjamín Fernández habló con EL NUEVO SIGLO, desde Asunción, sobre los avances de la investigación del homicidio del fiscal Marcelo Pecci, en torno a conocer quiénes fueron los autores intelectuales de este hecho sucedido en Cartagena de Indias el pasado 10 de mayo, mientras disfrutaba de su luna de miel.

Fernández aclaró que la opinión pública paraguaya sigue pendiente del caso, pero en este momento pasó a un segundo plano debido a la reciente renuncia del vicepresidente de ese país, Hugo Velásquez, luego de que Estados Unidos lo designara como “significativamente corrupto”.

EL NUEVO SIGLO: ¿Qué se ha sabido en este tiempo de los avances de la investigación del caso Pecci en Paraguay?

BENJAMÍN FERNÁNDEZ: En realidad todos nosotros hemos estado más pendientes de los avances que han venido desde Colombia; lo afirmado por el presidente Petro sobre identificar a un ciudadano uruguayo de una actividad bastante singular y de apellido Marset como el cerebro, el autor moral del crimen, ha sido muy trascendente esta mañana. Claro que el tema ha sido superado por lo ocurrido con el vicepresidente de la República paraguayo, pero lo que dijo el presidente Petro sacudió la estructura y creo que es una línea de investigación sobre la que van a tener que desanudar muchos hilos aquí en el Paraguay.           

Las mafias

ENS: ¿Definitivamente detrás del asesinato del fiscal Pecci se encuentran mafias del narcotráfico?  

BF: Absolutamente. Y es relevante la cuestión de los avances hechos en Colombia y la venida de expertos colombianos a Paraguay a trabajar. Aquí, por otro lado, lo único que hemos visto es que la Fiscalía no ha trabajado esa línea, porque involucraba a agentes fiscales que conocían las andanzas de Marset, mucho antes de que fuera sujeto de un allanamiento y de una búsqueda. La senadora paraguaya Desirée Masi identificó a un fiscal de nombre Lorenzo Lezcano, un exministro del Interior del Gobierno de Horacio Cartes, quien ya habría conocido sobre las andanzas de Marset mucho tiempo antes de que fuera investigado por narcotraficante, y algunos afirman que el fiscal Lezcano lo cubrió, a tal punto que en el día de hoy Masi afirmó que va a pedir su procesamiento, ya que cree que ha sido un verdadero cómplice y lo calificó de matón.

El fiscal Lezcano salió a defenderse de los ataques de la senadora Masi afirmando que no era cierto lo que decía y en cierta manera insinuó la senadora Masi que Lezcano prácticamente terminó siendo un cómplice del asesinato de su colega Pecci, ya que todos estaban integrando un grupo de fiscales investigadores del narcotráfico y de los movimientos en frontera. O sea, no se investigó el tema de la conexión Marset porque involucraba a actores fiscales y también a actores políticos, uno de los socios de Marset es un diputado de nombre Erico Galeano que ha sido identificado dentro de un operativo llamado “A ultranza Paraguay”, pero en su condición de diputado y también de cercano colaborador de Cartes, y como la Fiscalía General es sospechada de estar protegiendo a Cartes y a sus oferentes, no ha tenido la investigación debida.

Ahora, con esta identificación de Petro en Colombia, que señala a Marset, es probable que vuelva a moverse la línea de investigación que involucraría también al diputado Galeano.  



ENS: ¿Quién es Sebastián Marset?

BF: Es un personaje rocambolesco. Es un uruguayo que viene al Paraguay para jugar al fútbol en un club llamado Deportivo Capiatá, que estuvo en Primera durante un par de años. Luego volvió a descender y allí es donde entra en acuerdo con Erico Galeano, quien era el presidente del club y diputado nacional, ya en ese momento, y de allí después de jugar un par de partidos en el Capiatá abandona el fútbol y se convierte en una especie de representante de figuras artísticas y ya ingresa directamente a los negocios del narcotráfico.

Hay complicidad de la policía paraguaya, porque le da documento de identidad paraguaya a él, a su hermano y a su familia, todos uruguayos, pero ellos ya tenían antecedentes en Uruguay y la razón, que esta senadora Masi afirma, es que probablemente el fiscal Lezcano le advirtió que era sujeto de una investigación y se da a la fuga y cuando comienza la investigación él ya se encuentra en Dubái, que es el lugar en donde lo han identificado en este momento y donde ha sido primero detenido, después lo soltaron y está en un régimen de libre movilización en Dubái.

La línea que puso el gobierno colombiano sobre la figura del uruguayo Marset me parece que vale la pena continuarla. Nos sorprendió mucho que Petro se acordara del caso pocos días después de haber asumido, porque creíamos que el presidente colombiano estaría concentrado en otras cuestiones de mayores honduras en Colombia.

ENS: ¿Cómo ha sido el papel de la Fiscalía paraguaya para determinar los actores de estos hechos?

BF: La palabra más cortés es negligente. Yo diría que en muchos de los temas que tienen que ver con estos personajes ha sido cómplice e inclusive diría que la propia Fiscalía pudo haber puesto en riesgo la vida de Pecci aquí en el Paraguay y pudo haber evitado que fuera asesinado en Colombia, porque dentro de ese grupo de investigación cuatro de los fiscales son bastante cuestionados por su cercanía con casos en donde o no han investigado como debieran o han terminado otorgándoles libertades a personas que deberían estar presas. O sea, la Fiscalía ha sido muy cómplice de la criminalidad en estos casos.

Hay un exfical, Arnaldo Giuzzio, quien fue ministro del Interior y jefe de la Secretaría Nacional Antidrogas en el gobierno actual, que dio una versión el fin de semana y dijo que probablemente a Pecci lo terminaron vendiendo sus propios colegas, porque alguno de ellos pudo haber pedido dinero en su nombre y como no le resultó la petición por lo que pagaron terminaron contratando los sicarios que acabaron con la vida en Barú, ahí en Cartagena. Esa es una línea que, por supuesto, deber ser investigada.

La opinión en Asunción

ENS: ¿Cómo sigue el tema allá en Paraguay, la opinión pública no ha olvidado el asesinato de Pecci tres meses después?

BF: Sigue siendo un gran caso para nosotros, incluso es comparada la rapidez con que la policía y la Fiscalía colombianas dilucidaron el pleito, diciendo: hemos detenido a estos, los hemos procesado y los hemos condenado. El hecho de que los colombianos hubieran hecho, en un mes, un procedimiento que en el Paraguay se hubiera demorado cinco años ha sido sujeto de varias discusiones sobre cuestiones jurídicas, diciendo: mire, tienen que operar como los colombianos y no con toda esta bruma que rodea el tema de la Fiscalía. Hay que recordar que hasta el lunes pasado la fiscal general estuvo enfrentada a la posibilidad de ser enjuiciada políticamente y le faltaron a los diputados tres votos para que eso ocurriera. Es la tercera vez en cuatro años de mandato que la fiscal general, Sandra Quiñónez es sujeta de intento de juicio político, algo que nunca había pasado en esta República.