Debido a la crisis que actualmente presenta Hidroituango, por la incertidumbre que genera la culminación de la obra y sus posibles efectos, se escuchan voces acerca de un posible racionamiento de energía. En EL NUEVO SIGLO hablamos con Sandra Fonseca, directora ejecutiva de la Asociación Colombiana de Grandes Consumidores de Energía Industriales y Comerciales (Asoenergía), con el fin de que nos diera luces al respecto.

EL NUEVO SIGLO: ¿Se vislumbra un racionamiento de energía pronto en el país?

SANDRA FONSECA: Yo creo que eso no se puede afirmar tan categóricamente y depende de qué términos y en qué plazos estamos hablando. En este momento, en el corto plazo no hay ningún riesgo particular, como lo ha dicho el Gobierno hay suficiente agua en los embalses. La discusión que se está dando en este momento sobre si podría haber un riesgo de desabastecimiento tiene que ver más con la demora de algunos proyectos de generación de energía como Hidroituango, y a los demás proyectos que se han asignado por confiablidad que deberían estar en 2022, 2023 en adelante. Si esos proyectos se demoran, sí tendríamos el sistema con un nivel de vulnerabilidad muy alto.

ENS: ¿A cuáles proyectos se refiere?

SF: El principal, por supuesto es Hidroituango, pero también estamos pendientes de la ampliación de Termocandelaria, que entren a tiempo algunas de las plantas de gas asignadas en el cargo por confiabilidad. Y finalmente, si estos proyectos no van a estar a tiempo que se nos avise para tomar las medidas de respaldo oportunamente. Porque un proyecto de generación toma mucho tiempo en desarrollarse y entonces se debe saber con mucha anticipación para poder tomar la decisión de expansión adicional.

ENS: Dentro del plan de expansión también se habla de fuentes de energía renovable ¿Qué pasa con estas alternativas?

SF: Nosotros hemos advertido muy respetuosamente que el plan de expansión solo incluye además de Hidroituango, plantas eólicas y solares que son bienvenidas, lo que se conoce como energías renovables no convencionales, pero el mismo plan reconoce que a partir de 2027 no hay energía firme suficiente para respaldar la demanda. Lo que hemos conversado y sugerido es que sea un plan de expansión mixto con todos los recursos, no solo concentrar a los que producen energía renovables no convencionales, que son parte de la transformación, sino que se aseguré que haya expansión igualmente en hidroelectricidad, gas y otros.

El Gobierno tiene todo un plan de expansión de energías renovables no convencionales, básicamente eólicas y solares, que deberían entrar en los próximos tres, cuatro, cinco años. Y en este momento está avanzando en una subasta adicional también de energías renovables no convencionales. Como asociación apoyamos toda la expansión en este tipo de energías, porque hacemos parte del apoyo de la transición energética, y lo que estamos incentivando y pidiéndole al Gobierno es que la expansión sea una mezcla de recursos y tecnologías, por supuesto apoyando las renovables, pero además asegurándose que haya expansión utilizando hidroelectricidad y usando gas de manera competitiva.

ENS: Recientemente Colombia puso en marcha la hoja de ruta que incorpora el hidrógeno como combustible ¿Cómo ve esta opción?

SF: Pienso que en el futuro va a ser un recurso muy valioso, pero hay que recordar que el hidrógeno de alguna manera funciona como una especie de almacenamiento que requiere grandes inversiones y grandes volúmenes para desarrollar. Entonces, el hidrógeno va a ser muy importante, pero va a tomar bastantes años para que sea disponible, en el corto plazo aún no se podrá contar con ese recurso.

Hidroituango

ENS: ¿Por qué el proyecto de Hidroituango es clave para la generación de energía en el país y cómo puede afectar su demora en las tarifas?

SF: Nosotros hemos manifestado que los grandes usuarios necesitamos que Hidroituango entre a generar energía lo más pronto posible, que la demanda requiere y depende de este proyecto, primero para tener tarifas competitivas y segundo para que el sistema tenga energía firme, que es muy importante no solo por el respaldo y la confiablidad, sino para tener acceso también a energías en contratos que sean a un precio razonable. Entonces nosotros esperamos que el proyecto entre de manera segura, esté completo en todas sus fases y creemos que es absolutamente esencial para el desarrollo energético, productivo y económico del país.

En este momento, por lo que ha sido un año de alta lluvia, la generación en bolsa digamos que está a precios razonables; sin embargo, un año de retraso de Hidroituango está estudiado y establecido que podría aumentar las tarifas de generación en un 25%. Entonces en la medida en que haya menos generación firme, los precios de generación de todo el país subirán.

Pero más allá que el proyecto se demore, lo que nosotros decimos es que para la reactivación económica se necesita Hidroituango en la fase I y la fase II. Si se llegara a retrasar un año más quedaríamos muy vulnerables a cualquier evento como el del fenómeno de El Niño, cuando hay pocas lluvias y los embalses no estén llenos y se desocupen rápidamente, entonces ahí es donde se vuelve vulnerable.

ENS: ¿Se ha hablado que podría presentarse la situación de tener que importar energía? ¿Cómo ve esa posibilidad?

SF: La importación es para poder establecer un balance de energía firme en ciertas condiciones. Hoy en día Colombia tiene intercambios tanto de importación como de exportación con Ecuador y todos los días el sistema, de acuerdo a los precios de los dos países, decide en que vía transita la energía, en algunos momentos se importa y en otros se exporta dependiendo de lo que sea más competitivo. En momentos en que el sistema lo requiere se puede llegar a importar y sería un gran soporte para la demanda y para el país. Sin embargo, hay que avanzar en los proyectos de expansión internos también.

ENS: ¿Quiénes conforman Asoenergía?

Asoenergía está constituida actualmente por 15 asociados, grandes industriales incluyendo a los mayores consumidores de energía del país ubicados en el territorio nacional y somos representantes del cerca del 10 % del consumo de energía de usuarios no regulados en total.

De acuerdo a la regulación actual hay una diferenciación entre regulados y no regulados y todos los asociados de Asoenergía pertenecemos a los no regulados, grandes consumidores, y Asoenergeía es la única asociación independiente de grandes usuarios del país.

Algunas empresas pertenecientes son Cerromatoso, Organización Corona, Cementos Tequendama y Holcim,  Smurfitt Kappa, que son organizaciones de varios sectores de manufacturas, minas y de producción.