Conocidos los recientes informes de organismos como la ONU y el Codhes que han revelado cifras alarmantes sobre desplazamiento forzado en el mundo y en Colombia, la Alta Consejera de Victimas de Bogotá, Ana Teresa Bernal, reaccionó y manifestó que es necesario encauzar esfuerzos por mejorar el sistema de atención con mayores recursos y fortalecimiento de programas como el de vivienda.
Bernal, calificó de alarmantes las cifras conocidas sobre el fenómeno de desplazamiento forzado y dijo que el fin de conflicto armado no puede generar más violencia: "Es necesario prepararnos para el postconflicto y eso tiene que iniciar ahora. Proyectar las soluciones en temas de vivienda, en alimentos, en salud. Las victimas llegan afectadas a las ciudades. La firma de la paz es la oportunidad para que los gobiernos locales contribuyan de manera efectiva a ese proceso, porque son los que reciben victimas desplazadas y desmovilizados que también requieren recuperar su plena ciudadanía y sus derechos. Por eso la administración de la paz, es un tema de suma importancia en el marco de los diálogos y de las propuestas"
En ese sentido, la Alta Consejera, señaló que se han planteado varias ideas, por la experiencia que tiene Bogotá en el trabajo con victimas: "Se ha propuesto el Bono de paz, con cuyos recursos se logra consolidar varios proyectos en materia de atención y de inserción social. En este tema, el concurso de la empresa privada es fundamental. Unido al Bono de paz, está la compra de alimentos. Bogotá puede comprar productos fruto del retorno de las victimas al campo y de la entrega de tierras a los desplazados que las solicitan para su reubicación y en eso el INCODER tiene que apoyar. Son temas puntuales con los que logramos dar un paso concreto a la propuesta de paz".