La Fiscalía General de la Nación, ante un juez especializado de Bogotá, pidió sentencia condenatoria en contra del excomandante de la Policía del municipio de Soacha (Cundinamarca), Luis Felipe Montilla Barbosa, y el exjefe de Orden Público del entonces Departamento Administrativo de Seguridad (DAS), coronel en retiro, Manuel Antonio González Henríquez.
La fiscal del caso indicó que existen pruebas contundentes que comprometen a los procesados con los delitos de homicidio agravado con fines terroristas, en concurso con tentativa de homicidio; por los cuales se podría imponer una pena de 15 a 25 años y una multa de 200 a 250 salarios mínimos mensuales legales vigentes.
La sentencia fue solicitada por el crimen del extinto líder político Luis Carlos Galán Sarmiento, el concejal Julio César Peñalosa Sánchez y el escolta Santiago Cuervo, así como por las heridas causadas al escolta Pedro Nel Angulo Bonilla.
En la investigación de la Dirección de Análisis y Contexto se demostró cómo los dos procesados fueron parte fundamental para que se pudiera adelantar el crimen del excandidato presidencial Luis Carlos Galán Sarmiento, quien fue asesinado en la plaza principal del municipio de Soacha el 18 de agosto de 1989 hacia las 8 y 40 minutos de la noche.
En lo relacionado con la actuación del capitán Montilla Barbosa, se estableció que este se prestó para que el sitio al cual iba a llegar el candidato estuviera adecuado para que lo acordado con grupos de narcotráfico y los paramilitares se pudiera llevar a cabo.
Igualmente, se prestó para que al momento del arribo de Galán Sarmiento hubiera poca vigilancia de la misma Policía y el acompañamiento al político no se hiciera de la manera correcta.
El capitán Montilla Barbosa mintió en sus afirmaciones en las que señaló que al momento del atentado había desplegado todos los operativos de seguridad y se había contado con por lo menos 40 hombres, cuando en realidad solo se hallaban en el lugar un máximo de 10 uniformados, pese a la cifra de 80 hombres que manejaba en ese Comando.
Afirmó la fiscal que de un total de 24 puntos a tener en cuenta para la seguridad de Galán Sarmiento, ninguno de ellos se cumplió a cabalidad, pues, entre otras anomalías se impidió que un grupo de escoltas que había sido convocado para acompañar al candidato nunca pudiera cumplir su labor.
Dijo la representante del ente acusador que también se adulteró la minuta sobre la disposición de hombres y el cumplimiento riguroso de lo previsto para vigilar y cuidar a uno de los hombres más amenazados por el narcotráfico. Con este accionar se falseo todo el informe sobre los verdaderos hechos, enfatizó la fiscal.
Indicó que de ninguna manera el Comandante de la Policía de Soacha podía cumplir con sus tareas, ya que el procesado estaba al servicio de Gonzalo Rodríguez Gacha, alias el Mejicano, quien le pagaba para que colaborara en su accionar criminal.
Sobre la participación del exjefe de Orden Público del DAS, explicó que tuvo relación activa, al cambiar un mes antes al jefe de escoltas del Galán Sarmiento y algunos de quienes se componía el grupo de seguridad del líder político.
Se refirió a la participación del jefe de escoltas de Galán Sarmiento, Jacobo Antonio Torregrosa un exteniente de la Policía, quien asumió el cargo muy pocos días antes del atentado.
Indicó que con la complicidad de González Henríquez, Torregrosa cambió a algunos de los escoltas, con el fin de facilitar el accionar de los sicarios de Rodríguez Gacha, los cuales perpetraron el homicidio.
Tras finalizar los alegatos de conclusión, el juez especializado tomará la decisión sobre los dos procesados.
Por el crimen Galán Sarmiento se encuentran condenados John Jairo Velásquez Vásquez, alias Popeye y el excongresista Alberto Santofimio Botero.
En proceso se encuentran el exdirector del DAS, general en retiro, Miguel Alfredo Maza Márquez y los dos procesados Montilla Barbosa y González Henríquez, quienes están privados de la libertad.