Un nuevo paquete de propuestas para adoptar en el sector de la construcción y evitar casos como el del edificio Space, en Medellín, surgió ayer de parte de Camacol, que hizo un llamado al Gobierno sobre el particular.
Una de las medidas es en cuanto a la creación de la Delegatura de Protección al Consumidor Inmobiliario al interior de la Superintendencia de Industria y Comercio, tal como lo propuso el Gobierno Nacional.
La intención es que “se precisen y unifiquen las competencias de control frente a temas asociados a la venta de bienes inmuebles”, aclaró la Cámara Colombiana de la Construcción (Camacol).
Es así que su presidente Ejecutiva, Sandra Forero Ramírez, presentó un paquete de propuestas encaminadas a fortalecer los procesos que intervienen en la construcción, desde el diseño hasta la etapa de posventa, brindándole seguridad al comprador y propendiendo a su implementación en todo el país.
Estas medidas, entre muchas otras, minimizarán costos para el Estado ya que la implementación de las mismas se asumirá en un alto porcentaje por el constructor.
“Una vez conocidos los anuncios del Gobierno Nacional, respecto a las medidas tomadas después de los hechos ocurridos en el Edificio Space, se identificó la oportunidad de hacer ajustes en temas como la acreditación de los profesionales que intervienen en el proceso constructivo”, agregó.
Forero también dijo que se deben hacer ajustes en el cabal ejercicio de la función pública que ejercen los curadores urbanos, el trámite del licenciamiento y “la colisión de competencias en materia de control urbano”.
También la necesidad de reforzar el mismo y la importancia de un ente especializado para dirimir las controversias que surjan en torno a la compra de productos inmobiliarios.
Al respecto, algunas de las medidas propuestas por el Gremio son el avanzar en el tema de la acreditación de profesionales de la construcción, que está contemplada actualmente en la ley, y crear el Registro Único de Profesionales de la Construcción.
“Se propone la creación de la figura del Revisor del Diseño, que además de ser un profesional acreditado será externo al constructor y su función implica la revisión de diseños estructurales y de geotecnia. El dictamen de esta revisión debe ser requisito para la radicación de la solicitud de licencia”, agregó.
También, frente al fortalecimiento de la función pública que ejercen los curadores, Camacol propone la creación de la Delegada de Curadores Urbanos de la Superintendencia de Notariado y Registro.
“Esta Delegada tendrá la misión de adelantar el proceso de selección de curadores y ejercer el control sobre su ejercicio”, indicó Forero.
Durante la ejecución del proceso constructivo, se recoge lo establecido actualmente por las normas, aunque exigiendo que la supervisión técnica siempre sea externa y ejercida por un profesional acreditado, “que tiene el deber de reportar periódicamente a las autoridades de control sobre su labor y cuyo producto final debe corresponder a un informe de supervisión técnica de obra”.
En la fase de control, “el mismo Supervisor Técnico Acreditado deberá expedir un certificado de recibo de las obras, acompañado del informe final de supervisión. Esto con el objetivo de certificar que el proyecto cumple con lo aprobado en las licencias y con las normas urbanísticas y técnicas”.
Este informe deberá protocolizarse con la escritura pública de compraventa, sostuvo.
Para sacar adelante este proceso será fundamental el trabajo conjunto entre el sector privado, las autoridades locales y el Gobierno Nacional. “Hemos enviado una comunicación al Gobierno Nacional y a la Asociación de Ciudades Capitales en la que mencionamos expresamente la disposición del Gremio para aportar su conocimiento y experiencia en la estructuración de las medidas que se tornen necesarias para fortalecer los procesos asociados a la construcción de edificaciones”, dice la Presidenta de Camacol.