Los bancos españoles, que recibieron en 2012 una ayuda europea de 41.300 millones de euros, son más sólidos pero, en un contexto de recesión, enfrentan riesgos elevados, estimó el Fondo Monetario Internacional (FMI).
"La implantación de un programa de ayuda al sector financiero español sigue sobre rieles", estimó el FMI en su tercer informe de etapa escrito luego de una misión a Madrid del 21 al 31 de mayo.
Estos informes de etapa se inscriben en el marco de la supervisión por la troika (FMI, Comisión Europea y Banco Central Europeo) de las estrictas condiciones que acompañan la ayuda europea a los bancos españoles acordada en julio de 2012.
Para el FMI "las acciones para recapitalizar una parte del sector bancario y la transferencia de activos a Sareb (Sociedad de Gestión de Activos procedentes de la Reestructuración Bancaria) aumentaron de manera importante la liquidez y la solvabilidad del sistema".
Pero "a pesar de los progresos, los riesgos para la economía y por consecuente para el sector financiero siguen siendo elevados", advierte el FMI, ya que la quinta economía de la zona euro aún debe corregir cierta cantidad de desequilibrios a través de un saneamiento fiscal, una reducción aún más marcada de los precios de las viviendas y una disminución de la deuda privada.
España está en recesión desde mediados de 2011 por lo que "los riesgos para el sector financiero por el entorno económico difícil son importantes", insiste el FMI que recomienda a los bancos limitar su distribución de dividendos y de bonos para preservar su nivel de fondos propios./AFP