Peñalosa pone a Transmilenio sobre Metro | El Nuevo Siglo
Miércoles, 15 de Octubre de 2014

Aunque no se nombraron en los mensajes, las diferencias sobre una de las principales soluciones para la tortuosa movilidad en la capital del país, quedaron evidenciadas entre el alcalde Gustavo Petro y el exburgomaestre Enrique Peñalosa por los resultados del estudio en detalle de la primera línea del Metro pesado.

En este rifirrafe, mientras Peñalosa sugiere revisar la inversión del proyecto frente a las troncales de Transmilenio porque tienen mayor capacidad para transportar usuarios, Petro aseguró que hay personas que no quieren que Bogotá tenga Metro y por eso desestiman los estudios que permitirán que la primera línea subterránea de Bogotá sea una realidad.

“Esa línea de Metro, en el mejor de los casos, solamente movilizaría a cinco de cada cien ciudadanos. Transmilenio moviliza más pasajeros, tiene más capacidad que la mayoría de metros del mundo. Se debe analizar qué es mejor para la movilidad, si hacer 450 kilómetros de Transmilenio o 27 kilómetros de Metro, que cuestan lo mismo”, dijo Peñalosa.

Petro respondió que “esas son formas de decir que no hagamos el Metro, porque, claro, a cualquiera se le ocurre decir, hagamos un monorriel, hagamos uno de segundo piso y etc. ¿Qué significa eso? Volver a hacer estudios desde el grado cero, es decir desde que arrancamos hace seis años, todas esas frasecitas es para decir no hagamos Metro”.

El mandatario indicó que México se construyó sobre un lago y tiene 14 líneas subterráneas. “¿Por qué Nueva York está tumbando los segundos pisos de las líneas del Metro? Porque los segundos pisos desvalorizan la ciudad y resultan ser más costosos que si se entierran, por la desvalorización que producen”, dijo.

En este sentido, el concejal de la Alianza Verde, Antonio Sanguino, dijo que el Metro es una quimera, “porque los recursos hasta ahora comprometidos sólo llegan a 5,6 billones de pesos. La Nación, mediante acuerdo con el Distrito en el 2010, destinó 300.000 millones de pesos de vigencias futuras de transferencias para movilidad entre 2016 y el 2032, una vez terminen sus compromisos con las actuales fases del Transmilenio. Tendríamos asegurados por esta fuente 4,8 billones de pesos, sumados a los 800.000 millones que el Concejo autorizó en el 2011 como cupo de endeudamiento para tal fin, a pesar de que el alcalde Petro quiso sin éxito usarlo para su propuesta de tranvía por la Séptima. Es decir, que en materia de financiamiento el Metro está a menos de mitad de camino”.

Así mismo, el concejal Celio Nieves, del Polo Democrático, hizo un llamado a los gobiernos nacional y distrital para no escatimar esfuerzos para que el Metro sea una realidad en la Capital de la República y enfatizó que la primera línea proyectada desde la Administración anterior ya cuenta con los estudios técnicos para iniciar su construcción. “Será el eje articulador de todo el Sistema Integrado de Transporte Público (SITP) del cual deben hacer parte más troncales de Transmilenio (ejecución inmediata de la Avenida Boyacá) los cables aéreos de San Cristóbal y Ciudad Bolívar, las obras de integración de Transmilenio, la construcción de ciclorrutas y Ampliación y mejoramiento de corredores viales”.

Petro recordó que hay una serie de voces que lo que viene diciendo es que Bogotá no tenga Metro, porque la inversión nacional en Bogotá es un recurso que se le quita a otras regiones.

“Bogotá generalmente hasta la fecha ha sido una exportadora de recursos hacia otras regiones del país, es decir, hemos financiado desarrollos incluido el Metro de Medellín. Ahora los datos del estudio mostrarían que por unos años la tendencia se reversaría, es decir que la Nación ayudaría por primera vez a Bogotá más que lo que Bogotá aporta a la Nación por unos pocos años, porque la tendencia vuelve a revertirse ya que la ciudad es una exportadora de ingresos para el Estado”, sostuvo Petro.

Por último, manifestó que la línea subterránea en Bogotá valorizaría los recorridos por donde pasará el Metro y esto es una ganancia para la ciudad.