El fallecimientode la senadora Gilma Jiménez no solo representa un golpe anímico para el Partido Verde sino un hecho que tendrá profundas consecuencias en el futuro de la colectividad en la medida en que era su mayor electora en el Congreso.

Además de haber fortalecido al Partido con la segunda mayor votación del país (207.799 votos), lo que permitió que la colectividad tuviera cinco senadores, Jiménez lo visibilizó  con temas como el referendo de cadena perpetua contra los violadores de menores de edad y el impulso a la llamada ‘Ola Verde’ a la Presidencia.

Es así como su partida se da en medio del reto de superar el umbral del 3 por ciento de las elecciones parlamentarias del próximo año, lo que tiene en riesgo de desaparecer al movimiento, y de la división entre sus principales integrantes.

Frente a este panorama, el concejal verde Antonio Sanguino dijo que el Partido ya venía tomando medidas frente a los retos del próximo año.

“El Partido Verde está haciendo arreglos, consolidando la unidad interna, reconociendo liderazgos importantes, no solo el de Enrique Peñalosa, Luis Eduardo Garzón y Sergio Fajardo, sino nuevos”, explicó el cabildante. 

Dijo que la colectividad trabaja por la unidad, afectada por diferencias internas, así  como por la cercanía de algunos de sus miembros con el uribismo.

“Ya lo estábamos haciendo y la senadora Gilma lo sabía. Vamos a reconstruir la presidencia colegiada del Partido. Habíamos pensado en que ella hubiera hecho parte de esa presidencia. Vamos a relanzar el Partido y vamos a salir a buscar a otros sectores independientes y alternativos para configurar una lista no solo para pasar el umbral, sino para llevar una bancada numerosa de senadores y representantes al Congreso”, precisó el dirigente.

Sostuvo el concejal que se buscará reconfigurar la ‘Ola Verde’ bajo las banderas de la reconciliación, de los derechos de los más vulnerables y los derechos de los niños.

“Creo que nos vamos a sobreponer a esa pérdida inmensa que significa la partida de Gilma Jiménez. Vamos a tratar de generar una nueva ola que remueva las fibras de la sociedad colombiana alrededor de la política decente, de la reconciliación, de los derechos de los más vulnerables, de los derechos de los niños. Vamos a jugar duro en la conformación de listas al Congreso y a la Presidencia”, afirmó Sanguino.

A su vez, el copresidente vocero de la colectividad, el representante por Bogotá, Alfonso Prada, reconoció las consecuencias que tendrá la ausencia de Jiménez, por lo que señaló que la situación será analizada por la Dirección Nacional próximamente.

“Gilma fue la mujer más votada en la historia del Congreso de la República, fue realmente algo sin precedentes y ella con su sola votación logró que el partido tuviera umbral, logró que pudiéramos inscribir un candidato presidencial, que tuviéramos una consulta popular. Naturalmente el impacto es inocultable", aseguró el representante Prada a Caracol Radio.

El reemplazo

Tras la muerte de Gilma Jiménez, el más posible reemplazo de su curul seríaRodrigo Romero,  quien tomaría el lugar a pesar de haber sacado 40 votos menos que Mercedes Maturana, quien ocupó el sexto lugar en las listas al Senado por los verdes en 2010.

Lo anterior, debido a que Maturana renunció a su militancia y en la actualidad es candidata a la Alcaldía de Cartagena por el Movimiento MÍO.

En las elecciones parlamentarias de 2010, Gilma Jiménez obtuvo 207.799 votos; Jorge Londoño,  81.749, Félix Varela, 35.163; John Sudarsky, 32.787; e Iván Name, 10.188.

El último adiós

El cuerpo de la exsenadora Gilma Jiménez fue cremado ayer en el cementerio Jardines de Paz después de haber sido velado en la Capilla Cristo Rey de la Funeraria Gaviria donde fue despedida por sus familiares, congresistas y diferentes personalidades de la capital del país como el alcalde Gustavo Petro.

Jiménez no fue velada en Cámara ardiente en el Congreso, ya que no fue voluntad de la exparlamentaria en vida.