Diosdado Cabello, número dos del chavismo, fue ratificado este domingo por el oficialismo como líder de la Asamblea Nacional de Venezuela en medio de protestas de la oposición, que acusó al liderazgo del Legislativo de estar sometido al presidente Nicolás Maduro.
Cabello fue ratificado unánimemente con los votos de los diputados del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) y sus aliados en la sesión inaugural de 2014 de la Asamblea Nacional, en la que la oposición votó en contra y no presentó propuesta para la dirigencia.
Tras juramentar, Cabello dijo que en este nuevo periodo seguirá impulsando el proyecto socialista desarrollado por el expresidente Hugo Chávez (1999-2013), fallecido hace 10 meses.
La ratificación de Cabello fue criticada por la bancada opositora, sobre todo por María Corina Machado, de la Mesa de Unidad Demorática (MUD).
"Hemos visto una Asamblea Nacional absolutamente sumisa al poder Ejecutivo, entregando una ley habilitante para la cual no tenían los votos a través de la corrupción del sistema judicial", dijo Machado antes de que su discurso casi fuera acallado por oficialistas que gritaban "¡Chávez vive, la lucha sigue!".
El pasado 15 de noviembre, luego de que el Ministerio Público inició un juicio por presunta corrupción contra una exdiputada chavista, que dejó el cargo a su suplente simpatizante del oficialismo, el PSUV y su aliados consiguieron los 99 votos para aprobar una ley especial que consolidó el poder de Maduro.
Mediante esta ley, Maduro dispone de superpoderes para gobernar por decreto para combatir lo que denomina una "guerra económica" interna y luchar contra la corrupción, mientras que la oposición denuncia que podrían ser utilizados con fines políticos.
Cabello respondió a Machado alimentando el debate, desatado el viernes, tras difundir el gobierno una lista con los nombres y cédulas de identidad de políticos y simpatizantes opositores que habrían viajado al extranjero para el final de año.
"La oposición como siempre no le hace ninguna propuesta al país (...) pareciera que en ese sector de la oposición o no hay nadie que pueda ser presidente de la Asamblea, no hay o están de viaje (...).", dijo Cabello en referencia a los viajes de opositores.
La polarización creció en Venezuela luego del triunfo de Maduro en las presidenciales de abril de 2013, por una diferencia de 1,49% de los votos, resultado aún impugnado por la oposición.