Luego de que el Gobierno anunciara que mañana termina la segunda jornada de normalización de compromisos económicos de los agricultores de papa, la Federación Colombiana de Productores de Papa (Fedepapa) propuso que se les comprara las deudas que tienen con la banca privada.
Así lo comentó el presidente de la Junta Directiva de la Federación, Alejandro Estévez, en diálogo exclusivo con EL NUEVO SIGLO al explicar que se hace necesario dicha compra por parte del Banco Agrario y así entrar a una socialización de deudas.
También se refirió a la propuesta de crear un sistema de información para censar a los paperos y a la importancia de fortalecer las medidas de apoyo del Gobierno.
EL NUEVO SIGLO: ¿Considera que las brigadas del Banco Agrario son adecuadas para normalizar las obligaciones de los cultivadores?
ALEJANDRO ESTÉVEZ:El gran problema que se está presentando es que muchos de los agricultores no tienen las deudas con el Banco Agrario sino con la banca privada. Esto ha hecho que el impacto que tienen las brigadas no sea suficiente para resolver los problemas.
Muchos de estos programas son reestructurados, quiere decir que los agricultores que se reestructuran quedan con tasas más costosas que las que tenían. Además quedan como reestructurados y esto les afecta la estabilidad bancaria.
Por eso proponemos que el Banco Agrario salga a negociar las carteras que tiene la banca privada para que sean reestructuradas con unas tasas de crédito que le permitan al agricultor recuperarse, y que no le aumenten los costos.
ENS: ¿La tramitología del Banco Agrario afecta el acceso al crédito?
AE:Es claro que el Banco Agrario no es tan ágil como la banca privada y eso ha afectado la rapidez con la que les asignan los créditos a los agricultores.
La diferencia son 3 puntos de la banca privada con respecto al Banco Agrario, pero es claro que cuando se solicita un crédito la respuesta es inmediata. Esto les obliga a pagar los créditos un poco más altos que la banca del Gobierno pero que les soluciona su problema.
Calculo que más del 50% están con la banca privada.
ENS: ¿La propuesta de compra qué otras especificaciones trae?
AE: La papa no es solo el cultivo que dura seis o siete meses, dentro de las propuestas que está pasando Fedepapa es establecer un sistema de crédito especializado en tema papa.
Es decir que el agricultor de papa puede rotar préstamos con cultivos de hortalizas, arveja o zanahoria y que el plazo de pago sea a un mediano plazo. La idea es ampliar los plazos para que le permitan mejorar su flujo de caja y sus sistemas de pago.
Estamos revisando con Finagro la alternativa de revisar los costos de producción del Banco que hace varios años no se registran. Tenemos unos costos sumamente bajos reportados por el Banco Agrario, lo cual hace que el porcentaje que presten sea bajo.
Diferenciación de cultivos
ENS: ¿Entonces qué abarca la petición?
AE: Proponemos diferenciar la papa en sus cultivos y determinar cuál es el ciclo rotativo de cada uno de ellos así como su costo. De esta forma se puede estudiar un crédito más accesible a las necesidades del agricultor.
ENS: ¿Cuáles son esas diferenciaciones?
AE: Por ejemplo, con la papa pastusa y capiro, el Banco ha hablado de costos inferior a $14 millones por hectárea y nosotros lo estamos llevando a $18 millones.
Este dinero de diferencia es el que le hace falta al agricultor, además los plazos para pagar el cultivo de papa están entre 8 y 10 meses y los estamos llevando a unos ciclos de producción cercanos a los 24 meses. Esto permite mantener un flujo de caja más controlado y no tener unas obligaciones tan altas, pues algunas veces no se alcanza a recuperar la inversión.
ENS: ¿Las ayudas del Gobierno han sido suficientes?
AE: Hay varios tipos de ayudas, hay un consumo de papa que ha bajado y ha afectado la demanda, por ende el precio de compra al agricultor cambia.
También el Gobierno puso $40 mil millones como subsidios a los agricultores, pero vemos muy difícil que este dinero llegue directamente a los agricultores debido a la informalidad.
También es claro que el subsidio al dividirlo en 140 mil hectáreas queda como en $300 mil pesos por hectárea, es insignificante. Proponemos buscar con el Ministerio programas que beneficien a los agricultores pequeños para que esa plata sea aprovechada de la mejor forma posible.
ENS: ¿Qué tan alta es la informalidad?
AE: Lamentablemente somos de los sectores más informales, no tenemos un censo que nos permita decir claramente áreas, fechas de cosecha y total de agricultores. Trabajamos sobre estimado del último censo que fue hace varios años.
Si el Gobierno nos apoya con un sistema de información sería un sector más organizado.