Este es “un Partido Conservador que cambió las banderas por las sábanas”, le dijo ayer el expresidente Andrés Pastrana en entrevista que le concedió al equipo de Vicky Dávila, en La FM, de RCN.
Se refería, según explicó él mismo, a “las sábanas de los moteles que sabemos que la Dirección de Estupefacientes le dio a familiares del presidente del partido, muchos de ellos hoy en día cuestionados”, agregando que “buena parte de la directiva” conservadora “está comprometida con los grandes temas de corrupción que los heredamos del anterior gobierno”.
También calificó al presidente del Congreso como “absolutamente desatinado”, considerando que “no puede ser posible que el presidente del Senado esté absolutamente en contravía de lo que pensamos los colombianos”.
LA FM: ¿No le parece un desastre lo que pasó con la Alcaldía de Bogotá?
ANDRÉS PASTRANA: Desastre. Ese es un desastre. Y lo digo yo como conservador. El primer Alcalde conservador y el primer Alcalde elegido por voto popular fui yo en Bogotá. Y desde esa oportunidad no hemos podido nombrar candidato para ocupar de nuevo el cargo.
El Partido Conservador tiene que se alternativa y no solamente en Bogotá.
¿Pero qué estamos viendo hoy? Un Partido Conservador que cambió las banderas por las sábanas.
Eso es lo que ha pasado en el Partido Conservador. El presidente del Partido Conservador cambió las banderas del partido por las sábanas.
LF: ¿Y por qué por las sábanas?
AP: Pues las sábanas de los moteles que sabemos que la Dirección de Estupefacientes le dio a familiares del presidente del partido, muchos de ellos hoy en día cuestionados.
Y eso es lo que vamos a ver reflejado en octubre. Es muy triste pensar que el Partido Conservador va a dejar de ser una alternativa para cada vez ir perdiendo y perdiendo más vocación, perdiendo más alcaldías, perdiendo más gobernaciones. Y lógicamente, cuando usted tiene una directiva cuestionada, como la que tenemos hoy, especialmente por el tema de los “agro-ingresos”, por el tema que tiene que ver con Estupefacientes, pues lógicamente ese es el castigo que va a sufrir el Partido Conservador.
Y es lo que va a pasar después de octubre qué es lo que va a pasar, porque necesitamos reformar, volver a o que era el Partido Conservador, ese partido de las banderas de la moral, ese partido de las banderas de la honestidad y no esas banderas que hoy están tratando de asumir quienes llevan la dirección el partido.
LF: Cuando usted me habla de las sábanas cambiadas por las banderas del Partido Conservador, me habla de José Darío Salazar…
AP: El presidente de la directiva del partido y buena parte de la directiva está hoy en entredicho.
A ver. Yo le pongo este caso. Si hace diez años Gabriel García Márquez con su realismo mágico hubiera escrito que loe parlamentarios iban a ser los encargados de manejar los bienes de los narcotraficantes, posiblemente le habríamos dicho a Gabo que había exagerado, que eso nunca se iba a dar en el país, que a ese punto no podía llegar el realismo mágico y resulta que ese realismo se convirtió en una realidad.
Y como le digo, estamos viendo que buena parte de la directiva está comprometida con los grandes temas de corrupción que los heredamos del anterior gobierno.
Entonces, por eso, si nosotros no hacemos ese cambio, si nosotros no reformamos efectivamente los estatutos del partido, si nosotros no convocamos a la gente nueva no convocamos a los jóvenes pues lógicamente va a ser un partido que va en vías de extinción.
LF: ¿Y cómo le parece el presidente del Senado?
AP: Yo creo que ha tenido dos hechos desafortunados el presidente del Senado. ¿Cómo va a decir que en este momento vamos a replantear la inmunidad parlamentaria? Dios mío, ¿a dónde estamos llegando?
Que los salarios de los congresistas no están alcanzando para tanquear un carro. Dios mío, ¡por favor!
Yo creo que los colombianos hemos rechazado de plano las dos propuestas que hasta ahora hemos oído del presidente del Senado.
LF: ¿Pero cómo lo califica?
AP: No, absolutamente desatinado. Es decir, no puede ser posible que el presidente del Senado esté absolutamente en contravía de lo que pensamos los colombianos.
LF: Y eso no es nada. El tema de los carros, por ejemplo…
AP: Yo coincido con la inmensa mayoría del pueblo colombiano que se ha hecho presente a través de Twitter y de las redes sociales: que discrepamos de lo que ha dicho el presidente del Senado.
LF: Él dijo que prefería que le dieran el subsidio de la gasolina y no robar al Estado.
AP: Está absolutamente desatinado. Eso es lo que está pasando en este momento en la presidencia del Senado, que hay un divorcio entre lo que estamos pensando los colombianos y lo que piensa esa directiva.