Los operadores actuales de la recolección de basuras en Bogotá (Lime, Atesa, Ciudad Limpia y Aseo Capital) anunciaron hoy que acudirán a los organismos de control para que intervengan en el proceso anunciado por el alcalde Gustavo Petro.
Según las compañías prestadoras de este servicio, las medidas tomadas por la administración distrital son un bloqueo y una interferencia a la libre competencia que rige en el mercado. El portavoz de los operadores, Armando Gutiérrez, expresó: “Estamos en condiciones y con toda la disponibilidad de prestar el servicio, pero hay limitaciones normativas para operar dentro de la libre competencia que hay en el mercado”. El funcionario se refiere al cierre del relleno de Doña Juana y la prohibición de facturar en forma conjunta con el servicio de acueducto, lo cual, según Gutiérrez “es violatorio”.
El funcionario explicó que pedirán la intervención de la Procuraduría, la Superintendencia de Servicios Públicos y la Comisión de Regulación de Agua Potable (CRA), teniendo en cuenta que “se viola el principio de libre competencia y el derecho de escogencia del usuario que están consagrados en la ley de servicios públicos.
Gutierrez dijo que, en su concepto, el Distrito está imponiendo un prestador único al usuario, a unos costos que debieron haber sido publicados un mes antes del inicio del nuevo modelo. Tambien se quejó de que el Distrito pretenda utilizar volquetas en la recolección de basuras, lo cual “lo prohíben normas ambientales, para evitar contaminación visual, olfativa e incluso saturación en el tráfico, porque no impiden la fuga de sustancias contaminantes".