Representantes de la ONU en Colombia pidieron proteger "con urgencia" a la población del departamento del Chocó (oeste), donde desde marzo se han registrado unas 6.000 víctimas de desplazamiento y 7.000 de confinamiento por acciones violentas en el marco del conflicto armado interno.

"La Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) y la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos manifiestan su creciente preocupación por la situación de vulneración a los derechos humanos que está sufriendo la población en el departamento del Chocó desde el mes de marzo y que ha ocasionado más de 6.000 víctimas de desplazamiento forzado y el confinamiento o restricción de movilidad de más de 7.000 personas", dijeron en un comunicado.

Estas instancias hicieron "un llamado a adoptar con urgencia todas las medidas necesarias para garantizar la protección y seguridad de la población civil que habita zonas, como la del departamento del Chocó, afectadas por presencia de grupos armados ilegales y donde se desarrollan acciones armadas en el marco del conflicto".

Las cifras de personas desplazadas o confinadas en sus poblados por la violencia fueron proporcionadas a la ONU por instituciones estatales que han seguido de cerca las consecuencias de los enfrentamientos entre grupos ilegales y autoridades, que se han incrementado en los últimos meses en el Chocó, una región selvática y muy empobrecida.

"Con el fin de prevenir estas afectaciones de la población civil es esencial que las partes del conflicto cumplan con todas sus obligaciones bajo el Derecho Internacional Humanitario y en particular aquellas de no establecer bases cerca de asentamientos de población civil y de no realizar bombardeos que pongan en riesgo a esta población", precisaron.

Según el comunicado, la mayoría de las comunidades afectadas son de origen indígena y afrocolombiano que han huido a zonas más pobladas buscando protección y, en algunos casos, han "desbordado" la capacidad de las autoridades locales y terminado retornando a sus poblados "sin las garantías necesarias de seguridad".

En abril, la Defensoría del Pueblo, que vela por los derechos humanos en Colombia, advirtió del desplazamiento de unas 3.000 personas en Chocó por la presencia de la guerrilla ELN y los enfrentamientos entre grupos ilegales y fuerza pública.

En la región confluyen actores como el Ejército de Liberación Nacional (ELN, guevarista) y la principal banda criminal del país, el Clan Úsuga.

El conflicto colombiano, que ha enfrentado durante más de 50 años a guerrillas, paramilitares y fuerza pública, deja ya 260.000 muertos, 45.000 desparecidos y 6,8 millones de desplazados.