Por: Esteban Lugo,
Periodista EL NUEVO SIGLO
PROCESO ES sin duda una de las palabras más controvertidas en el mundo del fútbol y, en la mayoría de los casos, de las menos respetadas. Sin embargo, hubo un tiempo en el fútbol colombiano de largos procesos, donde, por ejemplo, Alexis García estaba campaña tras campaña en La Equidad, Alberto Gamero hacía lo propio con Chicó y Flabio Torres se mantenía constantemente reconstruyendo la nómina del Pasto. Pero esas épocas pasaron, y ahora volvimos a la constante histórica donde los entrenadores vienen y van, aunque por lo menos ya existe regla que impide que un técnico dirija más de un equipo del rentado local cada año. En favor del respeto a los procesos, cabe decir que los cuatro primeros equipos de la tabla de posiciones, Santa Fe, Nacional, Once Caldas y Junior respetaron los entrenadores que traían y entre el actual grupo de los ocho, solo Chicó y Millonarios arrancaron el año con entrenadores nuevos.
La corta luna de miel colombo-uruguaya
Un semestre duró Julio Comesaña al frente de Patriotas. El uruguayo se fue a comienzos de febrero tras un empate y una derrota con el cuadro boyacense, a la postre siendo reemplazado por Harold Rivera. Desde entonces, Patriotas solo ha obtenido dos victorias contra Huila e Itagüí, que sumadas a dos empates lo tienen en el noveno puesto con ocho unidades.
Patriotas tiene jugadores interesantes como Emmanuel Prisco, que increíblemente lo dejaron ir de Fortaleza cuando casi cometen el mismo error con George Saunders, Rubén Pico y el uruguayo Maximiliano Britos, además de reciclar a un goleador que estaba fuera de circulación como Carlos Rentería.
Aunque el perfil de la nómina del cuadro boyacense es más como para un técnico formador como Rivera que para uno de carácter y máxima exigencia como el uruguayo, sí queda en el ambiente la duda de qué hubiera podido hacer Comesaña si se hubiera respetado su proceso, pues el año pasado logró alejar del descenso a un equipo que no ganó un solo partido en el primer semestre de 2013.
Un teacher que no enseñó
Guillermo Berrío abandonó Alianza Petrolera el 19 de febrero tras caer en la sexta fecha, en los últimos minutos, 2-1 contra Independiente Santa Fe en un partido que los petroleros iban ganando hasta el minuto 80, tras el cual se vino la remontada cardenal. Esa fue la gota que rebozó la copa, sin embargo el destino del “Teacher” al frente de los de Floridablanca parecía sentenciado desde aquella goleada inmisericorde que le propinó su “hermano mayor” Atlético Nacional por marcador de 5-1. Y es que precisamente esa condición de equipo filial de los verdolagas perjudicó los prospectos en nómina de los aliancistas, pues salieron para este torneo elementos clave como Cristian Palomeque (hoy en el Once Caldas) y Michael Rangel (en el Envigado) y Berrío nunca pudo reemplazarlos con los que llegaron. De hecho, tampoco ha podido el actual adiestrador Adolfo León Holguín, puesto que el equipo sigue en el sótano del torneo y sin ganar un solo partido.
A pesar de que Wilson Mena trata de anotar goles y remar contra la corriente, el resto de la nómina es definitivamente muy liviana y promesas como Niver Arango y Rafael Carrascal no parecen despegar este año, por lo que, de no presentarse un fuerte timonazo en lo que resta del año, el regreso a la segunda categoría parece inminente.
¿Hubo un complot?
A Pedro Sarmiento en el Deportivo Independiente Medellín le montaron quizás una de las nóminas más interesantes del fútbol colombiano, pero desde el comienzo, con sus peleas con Giovanni Hernández y después con la salida de Pino por indisciplina, se notó desde el comienzo que el manejo de grupo no iba a ser el fuerte del estratega antioqueño. A eso hay que sumarle sus tácticas excesivamente defensivas, que para nada se ajustaban a la nómina de jugadores diseñada para proponer que tiene ahora bajo su mando Hernán Torres.
El “Poderoso de la Montaña” acierta así en una decisión que, para muchos, debió haberse tomado desde el mismo momento en que el tolimense quedó libre de Millonarios, con lo que quizás el equipo no estaría hoy penando en el puesto 13, con una sola victoria y siete puntos, producto además de cuatro empates.
De nuevo secundado por el “Chusco” Sierra, Torres ya demostró en su primer partido contra Itagüí que no tiene miedo de salir a proponer juego ofensivo, montando una estructura ofensiva con Giovanni Hernández, John “La Goma” Hernández, Yorleys Mena y Germán Cano, dejando a otros en la recámara como William Arboleda, Yulián Mejía y Marco Pérez, a quienes utilizó en la segunda mitad. Por cosas como esta, el Medellín parece ser la excepción que confirma la regla de que los procesos deben respetarse, salvo cuando están tan evidentemente destinados al fracaso como estuvo el de Sarmiento.
Leonel Álvarez, cesado del Cali
El entrenador antioqueño Leonel Álvarez fue cesado en la noche del martes de la dirección técnica del Deportivo Cali. El presidente Álvaro Martínez tomó la decisión en base a los malos resultados y también declaró que hubo “otras cositas”. A nivel de rumor circulan versiones de líos de faldas en los que estaría involucrado el estratega antioqueño.
Álvarez dirigió al equipo en 50 partidos por la Liga Postobón. De esa cifra, ganó 20, empató 21 y perdió 9. El equipo anotó 72 goles y recibió 50 para un total de 81 puntos. En términos de porcentaje, Leonel tuvo el año pasado un rendimiento del 54%.
De momento, el equipo quedará a cargo de Héctor Cárdenas, y se especula que Fernando “El Pecoso” Castro sería el más posible reemplazo de Leonel Álvarez.