El hecho que 16 hospitales de la ciudad y los dos gestores encargados de la disposición final de residuos hospitalarios,  estén siendo notificados de autos de inicio para determinar qué pasó con 2,5 toneladas de estos elementos que aparecieron en un botadero clandestino del occidente de Bogotá, no significa que desde ya se les esté atribuyendo responsabilidades en los hechos.

 

Ese es un procedimiento de rigor establecido en la legislación vigente, sostuvo la Secretaria Distrital de Ambiente, Susana Muhamad, en reunión llevada a cabo la mañana de hoy.

 

La precisión se hizo luego de aclarar el sentido del comunicado prensa, emitido el pasado lunes, por cuanto pareciera que desde ya se le están endilgando responsabilidades a los hospitales y generadores, cuando apenas comienza la investigación.

 

Evidentemente el inicio de un proceso sancionatorio prevé los mecanismos de defensa y etapas probatorias para demostrar cada una de las actuaciones relacionadas con los hechos, explicó Muhamad a representantes legales y demás funcionarios de las entidades mencionadas hasta el momento. Todo ello antes de proceder a establecer sanciones y responsabilidades definitivas.

 

El  encuentro realizado también a instancias de la Secretaria Distrital de Salud sirvió para revisar qué está pasando alrededor de la cadena de disposición de residuos hospitalarios y cómo se pueden mejorar los controles para asegurar la disposición final de estos residuos, sin que exista, como debe ser, algún riesgo para la ciudad, los ciudadanos y las zonas protegidas.