En apenas dos partidos el brasileño Neymar ya ha conquistado su nueva casa: París. Tres goles y otras tantas asistencias, además de toda una retahíla de gestos técnicos, regates y fintas le acreditan. Tan a gusto está que hasta se permite criticar a los dirigentes de su antiguo club, el Barcelona.
Sus inicios en ambos clubes (Barça y PSG) están siendo, de hecho, bastante diferentes.
Es cierto que a su llegada al club culé el delantero brasileño descubría un nuevo continente con apenas 21 años, algo que no le ha ocurrido en el Parque de los Príncipes. Neymar es ahora más maduro y cuenta con varias temporadas en un 'grande' como el Barça.
El astro carioca debutó con el Barcelona en 2013, en la ciudad polaca de Gdansk, en un duelo amistoso, saltando desde el banquillo y sin llegar a marcar. En el siguiente partido, también amistoso, ante su anterior club, el Santos, 'Ney' volvió a ser suplente pero esta vez dio una asistencia de gol.
También empezó desde el banco el debut liguero del Barcelona esa temporada, contra el Levante, el 18 de agosto de 2013.
No fue hasta la Supercopa de España, contra el Atlético de Madrid, cuando logró su primer tanto. Fue el 22 de agosto y -otra vez- saliendo desde el banquillo.
En su primer 'Clásico' frente al Madrid sí que fue titular. Anotó un gol además de dar una asistencia en la victoria de los suyos contra el eterno rival (2-1).
De Barcelona, Neymar añora la ciudad y sus compañeros de equipo, no así a los dirigentes de la entidad, a los que el domingo por la noche, tras la espectacular victoria del PSG contra el Toulouse, se refirió en términos poco amables