El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ganador en los comicios legislativos del 17 de marzo, presentó sus disculpas por sus declaraciones sobre los árabes israelíes durante su campaña electoral, que fueron recibidas con críticas, en particular en Estados Unidos.
"Sé que mis declaraciones la semana pasada han ofendido a algunos ciudadanos israelíes y miembros de la comunidad de árabes israelíes. Esa no fue nunca mi intención. Me disculpo por eso", dijo Netanyahu, durante un encuentro con árabes israelís en Jerusalén, difundido por televisión.
Pocas horas antes del cierre de las oficinas de voto, Netanyahu difundió un video en su página Facebook en el que incitaba a acudir a las urnas a los partidarios del Likud, su partido, con la advertencia de que "el poder de la derecha está en peligro. Los electores árabes van en masa a las oficinas de votación".
El presidente estadounidense Barack Obama criticó las declaraciones de Netanyahu. "Este tipo de retórica es contraria a la más pura tradición israelí", dijo Obama.
Y el portavoz del presidente norteamericano agregó que "Estados Unidos está muy preocupado por los discursos que dividen y buscan marginar a los ciudadanos árabes israelíes. Esto debilita los valores y los ideales democráticos, que son una parte importante de lo que une a Estados Unidos e Israel".
Los árabes israelíes, descendientes de los 160.000 palestinos que permanecieron su tierra tras la creación del Estado de Israel en 1948, representan alrededor de un 20% de la población israelí/AFP.