Nairo Quintana | El Nuevo Siglo
Domingo, 22 de Marzo de 2015

El país volvió a vibrar esta semana con Nairo Quintana, quien dio un golpe de autoridad en la carrera Tirreno-Adriático, en Italia, una de las más importantes en el arranque de la temporada europea.

Al ciclista boyacense sólo le bastó una etapa montañosa, cuyo nivel de dificultad aumentó por cuenta de la lluvia y la nieve, para demostrar que sus cualidades de escalador están intactas. A ello se sumó que luego tuvo un desempeño destacado en la última etapa, una contrarreloj individual en terreno completamente llano. Se pensaba que allí el holandés Bauke Mollema le quitaría el liderato al colombiano, pero apenas si pudo descontarle 21 segundos, teniéndose que resignar con el segundo puesto. Tras él se ubicó otro de los nuestros, Rigoberto Urán, quien también evidenció este año está para grandes cosas.

El ganar la Tirreno-Adriático le vino muy bien a “Nairoman”, toda vez que tras su triunfo en el Giro de Italia del año pasado, sus resultados no habían sido los mejores. Como se recuerda, una dura caída lo sacó de la Vuelta a España y lo incapacitó por varias semanas al cierre de la temporada 2014. Tras retomar el ritmo de competencia este año, asistió al Tour de San Luis en donde evidenció que aún le faltaba nivel. Vendrían luego los Campeonatos Nacionales, en donde una vez más sufrió una caída que le impidió pelear por los primeros lugares.

Tras ganar esta semana, Quintana no sólo demuestra que está al 100 por ciento de sus capacidades para pelear por el Tour de Francia, la más importante de las carrera de ciclismo por etapas del mundo, y en la que ya fue subcampeón y mejor novato. Igualmente tiene pensando ir a la ronda ibérica por el desquite, en tanto que ya se descartó que vaya a defender el título en el Giro de Italia.

El palmarés del colombiano también aumentó tras la prueba italiana. En materia de etapas ya suma 24 éxitos, en tanto que a nivel de carreras generales ganadas cuenta con el Giro de Italia (2014), Vuelta al País Vasco (2013), Vuelta a Burgos (2013, 2014), Tour de San Luis (2014), Route du Sud (2012) y Vuelta a Murcia (2012).

Lo más importante es que a Quintana se le nota con la misma cabeza fría del año pasado. No se confía ni cae en el peligroso triunfalismo. Es medido en sus palabras y sabe que en el ciclismo sólo importa el hoy y ahora. Sin embargo, es evidente que desde el punto de vista personal, este triunfo en la prueba italiana le da tranquilidad y lo confirma como el capo escuadra de su equipo Movistar, en donde es evidente que hay otros ciclistas de alta calidad que también quieren ser los líderes.

Como se ve, además de la Copa América de fútbol, a celebrarse a mitad de año en Chile, los colombianos podemos desde ya empezar a emocionarnos con una nueva temporada de emociones con nuestros escarabajos en las carreras más importantes del calendario mundial.