La ficha clave del escándalo de la red de 'chuzadas' ilegales que reveló la Fiscalía y en la que están involucrados el general en retiro Humberto Guatibonza, exdirector del Gaula, y el senador Armando Benedetti, entre otros personajes, está lista para contar lo que sabe sobre este caso.
Se trata de Juan Carlos Madero Mendieta, ingeniero asociado a la empresa Quarkrom, una de las compañías por las cuales se habría ayudado a dar apariencia de legalidad a esta red que, supuestamente, se dedicaba a obtener información privada de empresas, políticos, integrantes de la Fuerza Pública, funcionarios judiciales y particulares, con el propósito de venderla a terceros.
Esto luego de que un juez de control de garantías de Bogotá avalara el principio de oportunidad firmado entre el ingeniero y la Fiscalía General de la Nación dentro de la investigación.
Con esto, se suspende la persecución penal por un año en contra de Madero Mendieta por los delitos de concierto para delinquir y violación de datos personales a cambio que colabore de "manera eficaz" con las investigaciones que se adelantan por estos hechos ilegales.
“De acuerdo con la decisión judicial, el procesado se comprometió a colaborar con información importante para fortalecer las investigaciones judiciales relacionadas con las interceptaciones ilegales de llamadas telefónicas y mensajería de Whatsapp a ciudadanos, empresarios, políticos, funcionarios y personajes de la vida nacional, entre otros”, señaló la Fiscalía en un comunicado.
Madero es pieza clave en el caso porque, al parecer, habría manejado el portafolio más grande de clientes que pedían desde seguimientos hasta interceptar teléfonos de personalidades, entre las que figuraría Claudia Beltrán, esposa del fiscal Néstor Martínez.
Uno de los testigos que estaría ayudando a las autoridades a desenredar la madeja de este caso sería el coronel (r) Jorge Humberto Salinas, quien en su declaración reveló con detalles las reuniones que sostenía Madero con el senador Armando Benedetti, del Partido Social de Unidad Nacional (La U), y cómo fue el trabajo que le pidió el legislador a la cabeza de esa red de interceptaciones ilegales.
"Madero con seguridad me decía que se reunía con Benedetti, o Barbas como lo llamaba. Es más, en una ocasión en una entrevista con Vicky Dávila, me comentó que estuvo en esa entrevista acompañando a Benedetti. Entonces eso me confirma que tenía relación directa con Benedetti. Del trabajo para Benedetti recibí un pago de 4 millones de pesos. Se le trabajó y se le entregaron resultados. Y fueron tan buenos que llegó hasta el punto de que pidió realizar un tracking de ubicación de unas fechas en particular", según lo que se lee en la declaración que dio en su momento Salinas a la Fiscalía.