Ante la temporada de Semana Santa y el aumento de consumo de alimentos como el pescado y todos los derivados de la pesca, la Secretaría Distrital de Salud advirtió ayer a la ciudadanía la importancia de adquirir estos productos en establecimientos confiables, limpios y que garanticen las condiciones de conservación y cadena de frío.

Con el propósito de evitar cualquier tipo de afectación a la salud en la capital, como  las intoxicaciones por el consumo de este tipo de productos en mal estado, la entidad viene realizando operativos de inspección, vigilancia y control a comercios que expenden alimentos (en especial pescados) como plazas de mercado, depósitos, supermercados, minimercados, centrales de abastos, restaurantes, entre otros.

De hecho, durante la Semana Santa se intensifican dichos operativos en todas las localidades de la capital, y en la misma temporada del año anterior, a través de las Subredes Integradas de Servicios de Salud, se realizaron 240 operativos, en los que se inspeccionaron más de 560 mil kilogramos de alimentos y 18 mil litros de bebidas.

En total se decomisaron 3.311 kilogramos de pescado fresco y productos de la pesca, carne de cerdo y aves, quesos, productos de panadería, entre otros. 

Le puede interesar: Habilitan paso por vía Bogotá-Girardot pero con alto flujo vehicular

Por esta razón la entidad invitó a los compradores a evitar sitios con precios que estén muy por debajo de lo regular; siempre verificando la adecuada refrigeración y conservación de los productos y las características como color, olor y textura. Se recomienda abstenerse de comprar pescados y derivados de la pesca en ventas ambulantes y mantener estos productos siempre en refrigeración o congelación.

Esta es una campaña adelantada en el marco del modelo territorial “Salud a mi barrio” y su pilar de acciones de bienestar. En ese sentido, la Secretaría de Salud ha realizado de manera permanente actividades de inspección, vigilancia y control para evitar el expendio de alimentos y bebidas en mal estado, que puedan afectar la salud pública de la ciudad.

Recomendó que, una vez descongelados estos productos, no deben volver a congelarse y hay que estar muy pendientes del empaque, rótulos y fecha de vencimiento, los cuales deben estar vigentes.

“Al momento de adquirir pescado fresco, tenga en cuenta que las agallas estén húmedas y de color rojo brillante; que los ojos se vean sobresalientes, limpios, transparentes y brillantes; que la textura de la carne sea firme (que al oprimir no se quede hundida) y que su olor sea agradable”, recomendó ayer la Secretaría.