Frente a la última medida de la Administración Distrital de instaurar una cuarentena en las localidades de Suba, Engativá y Usaquén, confinando a 2.7 millones de habitantes del norte de la ciudad, el gremio de los comerciantes mostró su descontento y le solicitó a la Alcaldía de Bogotá que por favor reconsidere la medida. ¿La principal razón? Este acordonamiento lo único que hará será fomentar el comercio informal, según señalan.
“Funesta la medida de cuarentena por localidades en Bogotá. Estamos nuevamente como el año pasado, cuando en el mes de agosto tuvimos los peores índices de crecimiento de la ciudad con relación al resto del país, cuando se disparó el desempleo y cuando una gran cantidad de empresas que estaban cerrando lo tuvieron que hacer gracias a la misma medida” comenzó por referir el director de Fenalco Bogotá-Cundinamarca, Juan Esteban Orrego.
Agregó: “No queremos vivir nuevamente esta situación. Las medidas que se están tomando no tendrán los beneficios que se esperan, el comercio informal se disparará y las afectaciones por contagios continuarán vigentes, mientras que el comercio formal y los empleados formales se ven cada vez más afectados”.
Una cuarentena más dañina que en 2020
Adicionalmente, Orrego dijo que esta nueva cuarentena implicará que los arrendatarios que subsistieron no tendrán cómo pagar ni los arriendos ni los salarios del mes de enero, y que de hecho una cuarentena en estos momentos será aún más perjudicial que las que se instauraron el año pasado, precisamente porque en estos momentos el tren de la reactivación ya se está moviendo a paso constante.
“Esto dañará aún más la confianza del consumidor y muchos, ante la posibilidad de algo similar a lo que ocurrió el año pasado, seguramente cerrarán. Lo que pasó en 2020 fue que los comerciantes formales terminaron pagando los platos rotos y terminaron cerrando sus negocios, y ahora pasará lo mismo. Se perderán trabajos y los dueños de los establecimientos comerciales sufrirán”, sentenció Orrego a EL NUEVO SIGLO.
Adicionalmente, precisó que lo que se debe hacer es buscar que todo el mundo cumpla con la totalidad de los protocolos, formales e informales, y evitar a toda costa las aglomeraciones.
“La vida tiene que seguir. De lo contrario vamos a acrecentar la crisis humanitaria que ya estamos viendo. Sería muy importante que nos concentráramos en hacer cumplir lo que ya está en temas de protocolos y reglamentos, y no sacar cada vez que corresponda a más gente de la vida social y productiva pues, cada vez que ello pasa, dichas medidas terminan siendo para un porcentaje de la población que es el porcentaje formal que paga impuestos y genera empleo”, añadió el directivo.
Proyecciones 2021
Por último, en materia de proyecciones para el 2021, la principal meta de Fenalco será la de volver a rescatar a todos esos comerciantes que tuvieron que cerrar sus establecimientos, y que puedan volver nuevamente a continuar con la etapa productiva. “Para regenerar el tejido comercial nos preocupa mucho lo que está ocurriendo y sería muy importante que nos concentráramos en hacer cumplir lo que ya está”, finalizó diciendo a EL NUEVO SIGLO el director Orrego, quien reiteró que esta medida perjudicará los avances logrados a final del año pasado.
Y es que, al cierre del año pasado, Fenalco estimó que la última Bitácora Económica del 2020 concluyó con noticias positivas para los comerciantes, pues la trilogía del Día sin IVA, el Black Friday y el adelanto de la prima para muchos asalariados permitió un repunte importante, siendo el 21 de noviembre el mejor sábado en ventas del año pasado.
Para el 24% de los empresarios sus ventas expresadas en cantidades físicas fueron superiores a las obtenidas un año antes, el 37% dijo que fueron “sensiblemente iguales” y el 39% reportó reducción.