Piden a esta Jurisdicción que tenga en cuenta, al aplicar justicia, sus observaciones acerca de las declaraciones de los comparecientes, pues en muchos casos no corresponden a lo que realmente sucedió
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Tras dos años de funcionamiento de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) las voces de las víctimas crecen cada vez más reclamando verdad y justicia, como se conoció en los últimos días por parte de esta instancia al revelar que un total de 272 afectados hicieron comentarios a declaraciones que dieron desmovilizados de las Farc en el marco del caso 01 sobre secuestro, en donde la mayoría manifiesta su desacuerdo con lo afirmado, pues consideran que quieren evadir su responsabilidad, así como “maquillar” la gravedad y crueldad de lo ocurrido.
Sin duda, la situación que se presenta es de la mayor importancia porque no son en este momento los sectores políticos que tradicionalmente han alimentado el coro contra la JEP, porque consideran que supuestamente generaría impunidad frente a los graves delitos que cometieron las Farc en el conflicto armado, sino que ahora, son las víctimas que al conocer las declaraciones de los excombatientes sienten que se está escamoteando la verdad.
El caso 01 por secuestro fue el primero que abordó la JEP y por ende es el que más ha avanzado de los siete macroprocesos que ha emprendido. Hasta el momento se rindieron seis versiones colectivas, en las que participaron 350 comparecientes que integraron las Farc.
La Sala de Reconocimiento de la JEP informó que hasta el pasado viernes recibió 272 observaciones de las 1.908 víctimas acreditadas a las versiones rendidas por miembros de las Farc en el caso 01. Estas observaciones, así como las versiones voluntarias, son sobre hechos y conductas que fueron tipificados en la justicia ordinaria como: secuestro simple, secuestro extorsivo, toma de rehenes, desaparición forzada, entre otros tipos penales.
Agregó que, un análisis preliminar revela que la mayoría de las observaciones corresponden a desacuerdos con lo afirmado por los miembros de las Farc sobre el trato que recibían las víctimas.
Indicó la JEP que “los temas más recurrentes son las afectaciones a la integridad física y psicológicas sufridas durante el cautiverio por los malos tratos, como los reportados por Ingrid Betancur. Otros temas sobre los cuales hacen denuncias las víctimas en sus observaciones son el hambre constante, las marchas sin compasión por el estado físico de los cautivos, el ser observados incluso al hacer sus necesidades físicas, ser objetos de burla e insultos de manera constante, así como la falta de comunicación con sus familiares. Además, las víctimas reportan casos de violencia sexual, en especial contra las mujeres. En general, las víctimas en sus observaciones consideran que los miembros de la extinta guerrilla no reconocen ni aportan verdad suficiente sobre los vejámenes que padecieron”.
En segundo lugar, la observación más común de las víctimas se refiere a preguntas que los desmovilizados no respondieron y que éstas consideran, son aportes necesarios a la verdad plena dentro del caso 01.
Reclaman las víctimas
El general (r) de la Policía, Luis Mendieta, fue uno de los uniformados que más tiempo estuvo secuestrado por las Farc, lo mantuvieron durante 12 años en condiciones infrahumanas, pues además a las inclemencias de la selva se sumó que lo encadenaron.
“Nosotros estuvimos secuestrados bajo tortura permanente, estuvimos en jaulas de concentración las 24 horas” y “éramos escudos humanos para que la Fuerza Pública no actuara militarmente contra las Farc”, dijo Mendieta.
Agregó que, por lo que se han enterado a través de los medios “vemos que no están diciendo ni aportando nada de verdad, por el contrario se van por las ramas, pareciera que todo fuese un libreto. Están justificando su accionar y creo que aquí están ofendiendo gravemente la dignidad de las víctimas”.
Recordó que estuvo 5 semanas postrado en el piso “sin poder caminar porque fue después de la marcha de la muerte y allí no hubo medicinas, fue un abandono total”.
Manifestó que “con la JEP a las víctimas que ocasionaron las Farc nos excluyeron, no nos dejaron participar para hacer parte de esa institucionalidad”.
Por su parte los cuatro hijos del excanciller Fernando Araújo Perdomo, quien fue uno de los secuestrados políticos de las Farc y liberado por el Ejército gracias a la operación Jaque tras 6 años de cautiverio en la selva, pidieron en una misiva a la Sala de Reconocimiento de Verdad, Responsabilidad y de Determinación de los Hechos y Conductas de la JEP ser declarados víctimas.
"Las Farc no solo pretenden justificar uno de los más lesivos crímenes, sino que con desvergüenza y cinismo pretenden desestimar sus actos crueles hacia sus víctimas, en este caso hacia nuestro padre, aduciendo que le 'mantenían limpia la sabana'", dicen los Araújo en la misiva.
Agregan que "el secuestro es un delito contra la libertad, es por naturaleza un crimen contra toda la sociedad. Para quienes nos secuestran un ser querido, su ausencia se convierte en un duelo incompleto, es una incertidumbre sin caducidad. El secuestro, como todo crimen de lesa humanidad, no puede ser amnistiable y carece de toda justificación
En ese sentido el senador Fernando Araújo dijo que “las Farc nunca han mostrado ningún arrepentimiento, buscan desestimar injustificadamente uno de los peores crímenes que se han cometido en Colombia, el secuestro. Ante la actitud arrogante de las Farc con las víctimas, mis hermanos y yo, los hijos de Fernando Araújo Perdomo, hemos solicitado hacernos parte en el caso 001 sobre secuestros, como víctimas. No para victimizarnos sino para aportar a la verdad, porque la justicia tiene la obligación de buscar la verdad y de disuadir el crimen para evitar su repetición. La impunidad por el contrario implica esta actitud arrogante de las Farc, pero además reproduce el crimen”.
Por su parte el exsenador Luis Eladio Pérez manifestó “me parece de un cinismo tremendo de las Farc considerar primero que no eran secuestros sino unas retenciones”. “Que tal vez les quedamos debiendo dinero porque según ellos estuvimos en un hotel de cinco estrellas, lo que es una absoluta mentira. Estuvimos en la forma y en las condiciones más infrahumanas encadenados a los árboles”.
Montoya
Las víctimas por las ejecuciones extrajudiciales de sus hijos por parte de uniformados del Ejército que los asesinaron para hacerlos pasar como guerrilleros muertos en combate y de esta forma, mostrar resultados también han manifestado su descontento ante la JEP en el caso de la declaración que ha rendido hasta el momento el excomandante del Ejército, el general (r) Mario Montoya, pues consideran que no quiere aportar a la verdad, al manifestar que no sabe nada de estos hechos.
El pasado 13 de febrero, al término de la intervención de Montoya, de las 47 víctimas que hicieron presencia en la versión, se abstuvieron de formular preguntas y le solicitaron a la Sala activar el procedimiento adversarial y remitir al compareciente a la Unidad de Investigación y Acusación de la JEP o que se le inicie un proceso de exclusión de la jurisdicción, ya que a juicio de las víctimas el compareciente no aportó a la verdad.