Tras el escándalo por los excesos y lujos que tendría en su celda de la Penitenciaría La Picota el interno Juan Guillermo Monsalve, considerado el testigo estrella en el proceso contra el senador y expresidente Álvaro Uribe Vélez, el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec) tomó las primeras decisiones.
La primera decisión del Inpec fue trasladar de patio pero dentro del mismo establecimiento carcelario a tres compañeros de celda de Monsalve, el exparamilitar que tiene en aprietos la defensa del expresidente Uribe en un proceso que le sigue la Corte Suprema de Justicia por los llamados ‘falsos testigos’.
Se trata de José Elías Melo, expresidente de Corficolombiana y condenado por el escándalo de corrupción de Odebrecht; del abogado Leonardo Pinilla, conocido como ‘el Porcino’, procesado por el ‘Cartel de la Toga’, así como de Jhon Alexánder Colmenares Russi, condenado por la ‘Operación Quirófano’ en el escándalo de corrupción en el sector de la salud.
Melo, Pinilla y Colmenares “fueron trasladados de la casa fiscal del centro de reclusión a la Unidad de Medidas Especiales de La Picota en Bogotá, para que el Inpec pueda ejercer un mejor control sobre ellos”, de acuerdo con un comunicado oficial.
“En su nuevo lugar de reclusión, el Inpec garantiza la seguridad que requieren estos internos y puede mantener un mayor control para evitar el ingreso de elementos prohibidos”, señaló el Inpec.
El traslado estuvo motivado por el escándalo que se suscitó hace algunos días cuando fueron hallados elementos prohibidos en la celda de Monsalve, como varios teléfonos celulares, licor y un computador portátil.
Con respecto a Monsalve, de quien se dijo en días pasados que sería trasladado a una cárcel de alta seguridad en otra ciudad, el Inpec informó que está a la espera de una orden de la Corte Suprema de Justicia.
De otro lado, el Inpec continúa realizando investigaciones internas para establecer responsabilidad del personal de guardia frente a los elementos encontrados en un operativo sorpresa en la celda de Monsalve.
Tras las denuncias de un medio de comunicación, el Inpec realizó un operativo sorpresa y encontró dos botellas de licor, diez cervezas, seis celulares, dos computadores, dos iPad y una impresora, elementos que están prohibidos por el reglamento carcelario.