Hoy y mañana se llevarán a cabo las primeras dos audiencias públicas en donde los concejales socializarán con la ciudadanía en qué consiste el Proyecto de Acuerdo 163 de 2022, “por medio del cual se aprueba el ingreso del Distrito Capital a la Región Metropolitana Bogotá-Cundinamarca y se dictan otras disposiciones”.
La Región Metropolitana es un proyecto de integración que agrupa a más de 30 municipios aledaños. Sacarlo adelante le tomó tanto a la ciudad como al departamento de Cundinamarca más de tres décadas de intentos fallidos, pero durante el cuatrienio 2018-2022 los representantes a la Cámara de Bogotá y del departamento lograron materializarlo.
Así, y una vez superado su paso por el Legislativo nacional, este proyecto llegó al ámbito distrital el pasado 28 de marzo, pues la ley dispone que cada municipio o ciudad determine si se adhiere o no (a una figura como esta), y quien lo decide, para el caso de la la capital colombiana, es el Concejo de Bogotá.
Ya con los tres ponentes asignados evaluando el contenido de este proyecto, ¿en qué consistirá el proceso de socialización con la ciudadanía?
“La mayoría de los bogotanos no saben nada sobre este proyecto de integración y es imperativo que se socialice al máximo. El propósito de estas audiencias es que el Concejo socialice en qué consiste la unión de Bogotá-Región, puesto que esta es una decisión política que nosotros hemos de adoptar”, le dijo ayer a EL NUEVO SIGLO uno de los concejales que citó a esta audiencia, Álvaro Acevedo (Partido Liberal).
Agregó que hay que socializar a fondo todos los temas que aborda la Región Metropolitana de la Sabana, como por ejemplo qué significa interconectar a Bogotá con Cundinamarca en el tema ambiental, qué significará tener una agenda conjunta en materia de seguridad alimentaria y eso cómo se verá representado en beneficios para el campesinado. “Y, por supuesto, hay que explicar cuál es la importancia de hacer esta interconexión”, puntualizó Acevedo.
Añadió que para que estas audiencias se lleven a cabo, la comisión de Gobierno aprobó, en junta de voceros, la realización de estos espacios. “Este martes vamos a hacer una sesión conjunta en la plazoleta de la Gobernación de Cundinamarca. Está convocada a las 9:00 de la mañana y en principio se supone que estará el Concejo en pleno, así la sesión sea de comisión”, puntualizó el concejal Acevedo, quien advirtió que serán cuatro sesiones.
El ambiente en el Concejo
Ahora, este es un proyecto de región clave, en la medida en la que se agruparán más de 10 millones de personas y en donde está representado más del 31,6% del Producto Interno Bruto del país. De hecho, uno de cada tres pesos de los que se producen en Colombia se generan en la Región Metropolitana, el 20% de la población colombiana vive en ella y casi un millón de toneladas de alimentos se producen y comercializan en la misma.
Así mismo, esta integración tiene como finalidad garantizar la formulación y ejecución de políticas públicas, planes, programas y proyectos de desarrollo sostenible que beneficien tanto a Bogotá como a sus municipios vecinos, y también pretende unificar los modelos de seguridad, movilidad, servicios públicos y seguridad alimentaria, por hacer mención de algunos.
Dudas frente a este proyecto
No obstante, hay dudas en el Concejo de Bogotá frente a varios aspectos. Por ejemplo de acuerdo con Venus Albeiro Silva, uno de los concejales ponentes, lo que él está evaluando en estos momentos es la ley como tal.
“Creemos que la ley quedó muy mal hecha, tiene muchos errores y realmente los problemas no están en el proyecto de Acuerdo sino en la ley misma. El proyecto en últimas solo pregunta si Bogotá ingresa o no, pero hay que revisar las facultades del Consejo Regional que van a crear, declaraciones tributarias y temas de valorizaciones, etc., pero por ahora no hay nada seguro”, advirtió el concejal Silva, quien refirió que este será, sin duda, uno de los proyectos más importantes del cuatrienio por todo lo que implica.
Otro de los concejales que ha manifestado preocupaciones frente a este proyecto de Acuerdo fue el concejal de la Alianza Verde Diego Cancino, quien le dijo a esta redacción que “decidieron cómo sería dicha región y la pusieron por encima de nosotros. Es muy raro que ya haya una ley que nos impone una Región Metropolitana y después nos dicen a nosotros que la aprobemos o no. Si no aprobáramos, ¿qué pasaría? Nada”.
“¿Tu cuándo has visto esto? Esto es absolutamente inédito y surrealista. Típico de una película de Luis Buñuel”, le dijo a esta redacción el concejal Cancino, quien añadió que es claro que se necesita este proyecto integracional que articule a la capital con Cundinamarca, pero no como llegó al Concejo.
“Claro que se necesita una visión compartida, claro que sí, pero no esa. Esa en donde, por ejemplo, no sabemos qué pasará con el volteo de tierras; esa en donde hay una cantidad de intereses políticos; esa en donde se dinamita, en muchos casos, la autonomía territorial; esa en donde no se toca a la Corporación Autónoma Regional (CAR), que es el principal poder de corrupción de la región y ya lo podemos decir así porque ya destituyeron a Mota. Necesitamos una región que articule, pero no esta”, precisó Cancino.
Y otro de los concejales a los que les preocupa este tema es el cabildante del Polo Carlos Carrillo, quien a comienzos de este mes indicó que la realidad de esta ley es la de promover el volteo de tierras.
“La alcaldesa Claudia López, de la mano de Nicolás García y Jorge Emilio Rey, vienen impulsando la creación de la Región Metropolitana, tratando de venderla como la solución a los problemas de Bogotá y de los municipios aledaños, pero los documentos que sustentan el proyecto ya evidencian la verdadera intención de la Región Metropolitana: el volteo de tierras”, precisó a comienzos de este mes el concejal, refiriéndose en específico al desarrollo inmobiliario y la incertidumbre que hay frente a la habilitación del suelo y la disponibilidad de los servicios públicos.
Ambiente positivo
Por el contrario, el concejal Acevedo ve un ambiente positivo. “Obviamente no va a sacar los 45 votos de 45, pero sí creo que la mayoría de los concejales está sintonizada con el tema y hay varias bancadas que están muy comprometidas para que este tema fluya y sea un gana gana, tanto para Bogotá como para Cundinamarca”, indicó.
Reiteró, por consiguiente, que “el ambiente es muy positivo, en mi concepto, pero por supuesto hay concejales que se oponen en determinados temas y eso es natural. Aún así creo que la decisión va a ser adoptada con una mayoría, puesto que es una medida que beneficiará a todos los bogotanos”, finalizó diciendo a este medio el cabildante del Partido Liberal.
Y también para otro de los concejales ponentes, Julián Espinosa (Alianza Verde), es más el número de cabildantes que apoyan esta Ley de la República, que aquellos que no coinciden con ella.
“El ambiente no es fácil porque hay personas que no gustan de este proyecto, pero siento yo que es, sobre todo, por desconocimiento frente al mismo (…) No obstante este es un proyecto que traerá muchas ventajas para Bogotá, para su crecimiento comercial, para el establecimiento de un sistema de transporte más amplio y yo creo que hay que darle una socialización grande”, advirtió a este medio el concejal Espinosa.