En el marco del Plan Choque Seguridad 360, la Policía Nacional de todos los colombianos a través de la Dirección de Investigación Criminal e INTERPOL (DIJIN), la Policía Metropolitana de Bogotá y la Dirección de Inteligencia Policial, en un trabajo articulado con la Fiscalía General de la Nación, ejecutó una operación en los departamentos de Cundinamarca, Antioquia y Boyacá, que dejó como resultado la captura de nueve personas, presuntamente integrantes de una organización criminal dedicada al tráfico de explosivos y la incautación de sustancias peligrosas controladas utilizadas para la fabricación de artefactos explosivos improvisados y la minería ilegal.
Esta estructura delincuencial se dedicaba principalmente a la compra e importación legal de sustancias primarias para la elaboración de artefactos explosivos improvisados a base de clorato de potasio desde Alemania, Italia, Suecia, China y España; para el ingreso de estas sustancias al país empleaban como fachada una empresa de pirotecnia que aseguraba tener establecimientos de comercio físicos a nivel nacional, que existían únicamente en documentos, sin embargo, un vez puesta la sustancia en Colombia, era ofrecida y vendida a organizaciones criminales.
Estos productos eran almacenados en bodegas clandestinas sin asegurar la disposición y el control de estas sustancias colocando en riesgo la vida de las personas que residían y trabajaban a sus alrededores; este material era enviado desde Bogotá hacía otras ciudades del país a través de empresas de encomiendas y transporte público, con el fin de evadir los controles de las autoridades, haciéndolos pasar como productos agroquímicos, repuestos para vehículos y maquinaria pesada, colocando en alto riesgo la comunidad en general.
Mediante nueve diligencias de allanamiento y registro en las ciudades de Bogotá, Medellín (Antioquia) y los municipios de Mosquera (Cundinamarca) y Chiquinquirá en Boyacá, se realizaron las capturas, entre ellas, por orden judicial la de Darling Balaguera, presunto cabecilla principal, otro de los capturados fue Hoffman Melo, propietario de la empresa de pirotecnia, empresa utilizada para la importación de sustancias primarias.
Una de las sustancias incautadas en los allanamientos es clorato de potasio, este compuesto químico se encuentra dentro de los componentes controlados estipulado en la resolución 081 de 2002, expedida por la Industria Militar Colombiana en la que es clasificado como explosivo para todo efecto legal, al ser la materia prima e insumo que, sin ser explosivo individualmente, en conjunto conforman una sustancia explosiva.
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Esta sustancia mezclada con materiales reductores o combustibles puede volverse sensible a la temperatura y junto a elementos como el azufre y el fósforo se vuelve inestable, detonándose con la fricción o choque, siendo utilizada para la fabricación de artefactos explosivos improvisados utilizados en contra de unidades militares, policiales o para la explotación ilícita de los recursos naturales en diferentes regiones del país.
Entre los capturados también se encuentran Yeni Pulido y German Avendaño, quienes cumplían el rol de coordinadores, las funciones de distribuidores las realizaban los hoy capturados Jesica Espitia, Luis Ramos, Edwin Obando, Brenda Vásquez y Willinton Vásquez.
Incautación de abundante material explosivo:
En el procedimiento policial se realizó la incautación de 3 toneladas de sustancias explosivas, 8.005 detonadores no eléctricos, 8.160 fósforos eléctricos que permiten activar artefactos explosivos, 428 metros de cordón detonante, 37 detonadores modificados, 1.500 metros de mecha de seguridad, 3 armas de fuego tipo pistola, 1 revolver, 1 escopeta calibre 12, 2 armas de fuego traumáticas, 3 proveedores, 110 cartuchos calibre 9 mm, 14.400 dólares, 123 millones de pesos colombianos, 14 celulares. Así mismo, se afectaron las finanzas criminales de esta estructura, mediante la ocupación de 12 bienes con fines de extinción del derecho de dominio avaluados en 1.750 millones de pesos colombianos.
Este resultado se suma a la incautación de más de una tonelada de sustancia explosiva realizada el pasado 20 de abril en la ciudad de Bogotá, dentro del marco de una investigación que inició en octubre de 2022, que también dejó en otros eventos, la captura de 6 integrantes, la incautación de otra media tonelada de clorato de potasio, 990 detonadores, 42 kg de azufre y 14 kg de pólvora negra.
Los nueve capturados fueron presentados ante las autoridades competentes y deberán responder por los presuntos delitos de concierto para delinquir, fabricación, tráfico y porte de armas, municiones de uso restringido, de uso privativo de las fuerzas armadas o explosivos.