La Gerencia de Fronteras del Gobierno dio a conocer que la emergencia de migrantes en el municipio de Necoclí ya “no es una realidad” y se ha superado.

Esto luego de registrarse en los últimos días 400 migrantes, cuando en el peor momento de la crisis humanitaria se superaron los 20 mil. Estas personas tenían como propósito llegar a Estados Unidos a través de Centroamérica.

Algunas razones por las que se redujo la llegada de personas al Urabá antioqueño es por el endurecimiento de las medidas en Estados Unidos para la admisión de haitianos, según el gerente de Fronteras, Lucas Gómez.

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"Desde Necoclí podemos afirmar que la emergencia humanitaria que tuvimos en las pasadas semanas, ya no es una realidad (...) Esto se debe a diferentes razones: un flujo constante de las personas hacia Norteamérica, los enunciados del gobierno de Joe Biden con mayores restricciones para los haitianos hizo que disminuyera su llegada desde el sur del continente y el trabajo de Migración Colombia y la Cancillería", señaló Gómez.

Así las cosas, el turismo se volvería a impulsar para activar la actividad económica de la región. 

"Es un municipio que históricamente ha vivido del turismo y de sus maravillas naturales. Nuestro compromiso es generar las condiciones para que no volvamos a tener estos escenarios", puntualizó el funcionario.

Por otro lado, las autoridades anuncian medidas que permitan fortalecer la vocación turística de Necoclí, como una forma de contribuir a la reactivación económica, al tiempo que se preserve la riqueza natural de la zona.

La crisis humanitaria que se vivió en este municipio estuvo marcada por el desbordamiento de la capacidad instalada para transportar en embarcaciones legales a los migrantes en su tránsito hacia territorio chocoano. Esto generó represamientos, problemas para el abastecimiento de agua, ocupación del espacio público para las actividades cotidianas de los extranjeros y el colapso del hospital municipal, que llegó a quedarse sin medicamentos y sin la posibilidad de brindar atención a todos los que la necesitaban.

Durante este tiempo también hubo denuncias de algunos migrantes por sobrecostos en hospedaje, alimentación y otros productos de primera necesidad.