EL NUEVO SIGLO: Mañana se cumplen dos años de la avalancha que semidestruyó a Mocoa, ¿cómo avanza la reconstrucción?
CARLOS ADOLFO ARDILA ESPINOSA: Hay que dividir en dos la reconstrucción: hay una reconstrucción material que tiene como tarea la realización de varias obras, que van desde el acueducto municipal, pasa por vías, puentes, escuelas y demás infraestructura. Y hay una reconstrucción que a mi juicio es de las más importantes y es la reconstrucción social de Mocoa. La tragedia rompió con un tejido social que nos va a costar tiempo reconstruirlo y esa es una tarea que tenemos que articular y debemos todos estar empujando hacia el mismo lugar.
Creería que avanza la reconstrucción de la infraestructura con las dificultades propias de cualquier obra de contratación, especialmente en lo público. Se han presentado dificultades de orden social, ambiental, de orden técnico, pero avanza.
Falta mucho también, eso es cierto, pero avanza. Uno no puede ser injusto de decir que no se ha hecho nada. Hay avances importantes y hay tareas pendientes también.
En la reconstrucción del tejido social me preocupa que Mocoa aún no se repone en materia económica, que el comercio sigue afectado, que hay dificultades para generar empleo. Y es una tarea que debemos todos empezar a articular y empezar a tratar de pensar cómo vamos a reconstruir Mocoa. Aún hay miedo, aún hay temor, la lluvia sigue siendo sinónimo de tragedia y esa inseguridad que existe en Mocoa hay que empezarla a dejar de lado. Eso se logra también con algo de infraestructura, con obras de mitigación, se logra con sistemas de alerta temprana que le permitan a la gente empezar a perderle ese miedo a la tragedia que arrojó unas cifras bastantes luctuosas.
ENS: ¿La reconstrucción del acueducto ya está lista?
CAAE: La obra del acueducto, porque eso incluye reconstrucción y otros ítems nuevos también, ha enfrentado muchas dificultades, la primera de ellas fue una consulta previa con una comunidad indígena, consulta que tomó varios meses y que retrasó el inicio de obras. Esa misma obra ha enfrentado dificultades de orden técnico, se ha visto afectada en ocasiones posteriores a la tragedia, y esa fuente de captación es sobre la que se construyó el acueducto.
Hoy se habla de que hay que pensar en una nueva fuente de captación porque la turbiedad cuando se presentan lluvias en esa quebrada es muy alta y es imposible de tratar. No hay sistema que logre tratar las aguas de esa quebrada cuando se registran lluvias.
Es una verdadera contradicción de que cuando existan lluvias Mocoa va a estar sin agua, según lo que nos han informado los técnicos. Y a eso tenemos que buscarle una solución, seguramente hay otras fuentes de captación, hay estudios que así ya lo sugieren, con mejor caudal incluso, con aguas de menor turbiedad, y esto ya será una tarea siguiente. Digamos que será como otra fase de esta obra que aún no se termina.
ENS: ¿Qué mano le debe dar el Gobierno nacional a Mocoa para reconstruir su tejido social?
CAAE: Hay que generar empleo sin lugar a dudas, es la primera tarea que tenemos. Las obras desafortunadamente no han logrado ser ese motor principal, claro que han generado empleo sin lugar a dudas, pero no ha sido suficiente. La magnitud de la tragedia fue tan grande que las obras que se han realizado no han logrado ser un motor dinamizador. Se intentaron en algún momento unas estrategias como la exención de IVA a los materiales de construcción, esto en aras de promover la construcción de vivienda, la reconstrucción de las viviendas que se hayan visto afectadas, pero fue imposible acceder a unos beneficios porque para ese momento el municipio bloqueó la expedición de licencias de construcción. Entonces teníamos materiales de construcción a menores costos pero teníamos dificultades en el otorgamiento de licencias de construcción. Esa estrategia funcionó a muy bajo ritmo y no logró ser un gran dinamizador.
El comercio aún no se repone, hay muchas vías que no han podido entrar en funcionamiento desde ya hace ya dos años, algunas estaban pendientes de puentes y otras están pendientes de algunas obras de contención para poder mantener la vía firme, y esto afecta a grandes sectores del comercio de Mocoa y ese comercio también comienza a migrar a otros municipios, que resulta también costoso para Mocoa.