La Fiscalía adelantó un gigantesco operativo en tres ciudades del país y embargó 20 bienes por $10 mil millones a la empresaria Stella Durán y a Jorge Iván Salazar Sánchez, implicados al parecer en la red de corrupción que tramitaba irregularmente registros sanitarios con el Invima.
Según la Fiscalía, los miembros de esta organización que constituyeron un Invima paralelo, obtenían fraudulentamente autorizaciones en sus productos para salir al mercado, cuando en realidad no estaban verificados sus efectos en la salud de los colombianos ni se tenía certeza sobre la composición de los mismos. Las propiedades afectadas fueron ocupadas en diligencias cumplidas en Bogotá, Medellín y Pasto.
En la lista de bienes afectados se encuentran: seis sociedades del Instituto de Belleza Stella Durán S.A.S, ubicados en los sectores de Galerías, Kennedy, Quirigua, Restrepo, Unicentro y Venecia en Bogotá.
Igualmente fue afectada con extinción de dominio TV – Ideas S.A.S., sociedad de Stella Durán, titular de los registros sanitarios por los cuales presuntamente se sobornaba a funcionarios del Invima.
También fue embargada Icnag Farmaceuticals de Colombia, con establecimientos en Medellín y Pasto, cuyo representante legal es Jorge Iván Sánchez Salazar, capturado por el presunto pago de sobornos para obtener registros sanitarios falsos.
“Esta sociedad vendía productos como: Icncla (antibiótico), Bactiflox (antibiótico), Duoartril tabletas (antihipertensivo), Helmintaz tabletas (antiparasitario), Nimeflex (antinflamatorio), y Renilax tabletas”, indicó un fiscal.
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Otros bienes
Asimismo, fueron afectados el Laboratorio Dermis con sede en Bogotá y un establecimiento en Medellín, cuyo representante legal es Jorge Iván Sánchez Salazar, que comercializaba entre otros productos el Bactrogyn óvulos.
Productos del engaño
En los operativos, los investigadores advirtieron sobre la presunta actividad ilegal de la sociedad Antorcha de Luz S.A.S., vinculados a Stella Durán, cuyo objeto era la comercialización y fabricación de artículos esotéricos.
“En el lugar y luego de las verificaciones de los peritos del Invima, se constató que todos los elementos vendidos en los establecimientos de esta sociedad no tenían registros sanitarios, por lo que se presume que las personas que los adquirían fueron asaltados en su buena fe al comprar productos de los que no hay constancia sobre sus propiedades y, en algunos casos, serían adulterados”, dijo Andrés Jiménez, delegado para las Finanzas Criminales de la Fiscalía.
Dentro de los productos esotéricos que fueron detectados por los investigadores como una estafa y que pusieron en riesgo la salud de sus usuarios se destaca el producto conocido como Leche Mujer Amada un líquido que se comercializaba como riego con supuestos poderes psíquicos y mentales para atraer amor, suerte, dinero y fortuna.
En el acta de revisión del Invima se identificó que el producto era elaborado con ambientador para el hogar y no tenía trazas de los componentes que anunciaban en la etiqueta.
Las inspecciones arrojaron que otros productos que tenían las mismas finalidades como Mandrágora, Rompesaragüey, Cuerno Siervo y Kariaquito, también eran fabricados con productos de aseo.