La producción y exportación de cacao en Colombia ha crecido considerablemente en los últimos años. Según la Federación Nacional de Cacaoteros (Fedecacao), en 2018 el país exportó unas 7 mil toneladas de cacao en grano y al menos 13 mil toneladas en productos semielaborados y finalizados a base de este cacao.
El crecimiento del sector se ve evidenciado en que hace más de una década el país producía 33 mil toneladas de cacao, importaba 12 mil toneladas y exportaba alrededor de mil toneladas de cacao en grano, únicamente.
Además, en los últimos cinco años la producción ha alcanzado entre 55 mil y 60 mil toneladas.
Por otra parte, datos del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo reflejan que el número de exportadores de cacao pasó de 17 en el 2014 a 25 en la actualidad y que el país exporta USD 78,7 millones en cacao y sus derivados, productos que llegan a más de 40 países.
Eduard Baquero, presidente de la Federación, resaltó que estos resultados son gracias al trabajo que se ha hecho entre Fedecacao y las más de 52 mil familias que cultivan cacao en 422 municipios de 30 departamentos colombianos, que “en su gran mayoría han sido afectados por diferentes niveles de violencia”.
“En áreas donde la violencia ha sido muy fuerte, es donde hay cacao, y muchos de ellos básicamente son municipios prósperos y tranquilos gracias al cultivo de cacao”, dijo Baquero.
El presidente del gremio resaltó que incluso en muchos municipios el cacao ha sustituido todos los cultivos ilícitos, como en Arauca, que se declaró libre de dichos cultivos, así como en el Guaviare, el sur del Tolima, Bolívar o el bajo Cauca antioqueño.
“Es algo sobresaliente, que los productores a pesar de la adversidad (porque no solamente es la violencia sino también la falta de vías de comunicación o de infraestructura) los productores están sacando un producto catalogado por la Organización Mundial de Cacao como cacao fino de aroma. Y solamente el 5% del cacao del mundo tiene esa característica. Y nosotros en Colombia la tenemos”, señaló.
Algunos de los principales municipios productores de cacao son San Vicente de Chucurí, El Carmen de Chucurí, Landázuri y Rionegro, en el departamento de Santander; la zona del Catatumbo, en el Norte de Santander; Arauquita, Fortul, Saravena y Tame en Arauca; Apartadó, Chigorodó o Turbo, en Antioquia; Chaparral, Ataco y Planadas en sur del Tolima; así como Tumaco, en Nariño.
Las “múltiples ventajas” de los cultivos de cacao
Eduard Baquero destacó varias ventajas que trae el cacao a los cultivadores locales.
Una de ellas es que es un cultivo de tardío rendimiento y que no es perecedero, lo que permite que una vez se coseche, se fermente y se seque, permite transportarte “a lomo de mula, por río o vías bastante complicadas… una ventaja”.
Otra tiene que ver con la sostenibilidad ambiental. En palabras del líder de Fedecacao, “el cacao es una especie reforestadora, mejoradora y conservadora de suelos, además de que el cultivo no es monocultivo, sino que requiere dos tipos de sombrío: uno transitorio, que puede ser plátano, en algunos casos yuca o granadilla; y uno permanente, que son principalmente las especies maderables y en algunos las frutales como el aguacate”.
Dicho cultivo funciona como un bosque, ya que unas dos o tres veces al año, el árbol de cacao cambia de hojas, que una vez caen al suelo, se convierten en nutrientes para el mismo suelo y “naturalmente dentro de ese mismo bosque, se desarrollan muy bien la flora, fauna, microflora y microfauna”.
Y en materia económica, la ventaja tiene que ver con que “siémbrese donde se siembre, siempre va a haber quién lo compre. Hay una industria nacional que asume toda la producción nacional, y si se generan unos excedentes, se exporta”.
El cacao ha traído “paz y tranquilidad” a antiguas zonas de violencia
Pero hay un tema “más importante y es el social, porque se ha demostrado” que en zonas de violencia como las que se nombraron anteriormente el cultivo de cacao requiere principalmente mano de obra, y la mano de obra que utiliza es la mano de obra de las familias.
“En la medida en que ellos mismos se dedican a trabajar el cacao, los índices de violencia han bajado de manera notoria", asegura Baquero.
Los datos de Fedecacao señalan que de las 176 mil hectáreas aproximadas de cacao que hay cultivadas en Colombia, hay unas 25 mil que anteriormente fueron cultivos ilícitos. “Son zonas en las que hoy día se respira paz y tranquilidad, gracias al trabajo que hacen las familias al rededor del cacao”, dijo Baquero.
Otro dato que refleja el crecimiento del sector cacaotero en el país es que hace más de una década había apenas diez marcas de chocolate de mesa de empresas tradicionales, y en la actualidad, según Fedecacao, hay mínimo unas 150 marcas de chocolate, en la gran mayoría de casos iniciativas de las mismas comunidades, y otros productos con características especiales.
El cacao colombiano ha ganado premios internacionales muy importantes, como en el Salón del Chocolate de París, donde ha sido galardonado tres veces como el mejor cacao del mundo.
Estos datos se conocen en el marco de Chocoshow, la feria del chocolate que llega a Bogotá y que inició este viernes en la Corporación de Ferias y Exposiciones (Corferias).