Cuarto pico dependerá de cuándo Delta se vuelve dominante | El Nuevo Siglo
Cortesía Andrea Ramírez
Domingo, 15 de Agosto de 2021
Redacción Nacional

Andrea Ramírez, médica, epidemióloga, profesora de la Facultad de Medicina de la Universidad de los Andes y quien fue reconocida por la multinacional 3M como una de las 25 Mujeres más importantes en la Ciencia de Latinoamérica, le habló a EL NUEVO SIGLO sobre cuándo podría presentarse un cuarto pico y por qué la vacunación disminuirá la posibilidad de que haya nuevas mutaciones como la Delta.

ENS: Bogotá ya superó el tercer pico pandémico. ¿Por qué fue tan fuerte y tan prolongado?

ANDREA RAMÍREZ: En marzo nosotros ya sabíamos que el pico iba a crecer por Semana Santa. Es muy difícil decir que las protestas no causaran un aumento en los casos de covid-19. La evidencia así lo indica y es la razón más probable por la cual hubo un ascenso fuerte y acelerado del virus. Todos los efectos de las constantes protestas se vieron y eso hizo que el tercer pico durara 10 semanas. Esto no se había visto casi en ningún país. Lo vimos al comenzar la pandemia con los italianos y los países europeos que primero se vieron afectados porque no estaban listos en materia de planeación. A nosotros nos pasó por la movilización masiva.

ENS: ¿Es equivocado sugerir entonces que tuvo las características mencionadas por la variante Delta?

AR: Sí. Epidemiológicamente hablando no hay forma de saber si ya estaba circulando. Pero sí existe la posibilidad de que estuviera solo que no la habíamos identificado todavía. Fíjate que la secuenciación y las muestras moleculares han aumentado en Colombia pero no lo suficiente para decirlo con certeza. Reino Unido secuencia la mitad o más de sus pruebas, es muy activa, y de ahí que tengan más claro cuál fue la cepa que los infectó. Nuestras pruebas son la punta de un iceberg.

ENS: ¿Puede haber un cuarto pico?, ¿cuándo? y ¿podría ser similar al tercero?

AR: Hay un modelo de Guido España que muestra que si la Delta tuviera dominancia a mediados de julio (que no la tiene) el nuevo pico podría ocurrir en septiembre. Pero si la Delta tuviera dominancia en este momento el pico se correría hacia finales de septiembre, comienzos de octubre. Un cuarto pico dependerá de cuándo se volverá dominante la Delta. Cuando en la mayoría de las pruebas que se hagan se identifique esta variante, ahí es que comenzaremos a ver el inicio del cuarto pico.

Pero teniendo en cuenta que la variante se contagia el doble de rápido que la variante Alpha (que a su vez ya se propagaba el doble de rápido de la original), lo que los modelos recientes han mostrado es que solo la velocidad en la vacunación podrá frenar un pico muy fuerte dominado por la Delta.



ENS: ¿Y no hay forma de saber eso cuándo va a pasar?

AR: La variante Delta puede ser dominante en cuestión de semanas, aunque todavía no hay modelos epidemiológicos que hayan salido a dar resultados ni predicciones a este respecto. Recuerda que una persona contagiada con la Delta contagia a un promedio de 8 personas (la Alpha a 5 y la salvaje de Wuhan a 3).

Ahora, en este momento tenemos muchos más factores relacionados con tener un cuarto pico menos intenso como la vacunación acelerada. En cuestión de un mes se abrieron todas las etapas que faltaban y ya podemos vacunar niños de 12 años con comorbilidades. Si todas las personas se vacunan un cuarto pico podrá ser muy suave.

Vacunación

ENS: ¿Habrá más variantes y podrían ser peores?

AR: Sí. Y por eso es importante la vacunación. El virus siempre va a estar intentando adaptarse y evolucionar para seguir viviendo. Es su naturaleza y es el comportamiento de todos los virus. Lo que la literatura muestra es que los virus evolucionan siempre para obtener beneficios evolutivos y poder sobrevivir pues por sí mismos, no pueden replicarse. Ahí es en donde se dan las mutaciones y terminan dándose variantes más adaptadas evolutivamente y que probablemente se escaparán más fácil a la inmunidad y a los efectos de la vacuna.

Ahora, en la medida en la que no vacunemos a toda la población, el virus tendrá un espacio más amplio para seguir mutando y cambiando entre personas susceptibles que no están vacunadas. Entonces es cuestión de tiempo que haya una nueva Delta fortificada.

En una persona vacunada primero, el tiempo de transmisión es menor y la vacunación encuentra rápido al virus y lo elimina. Con la vacunación el periodo de infección es mucho menor y menos severo, por lo que el virus tiene menos chance de mutar y de replicarse en una persona no vacunada.

ENS: Ya se está hablando de una tercera y más dosis sucesivas de vacunas. ¿Cómo explicarle a la ciudadanía que eso no es una falla del sistema de salud sino que responde al comportamiento mismo del covid-19, que es como el de la influenza?

AR: La variante Delta del Sars-Cov-2 es tan transmisible como la varicela pero aún no tanto como el sarampión. El Sars-Cov-2, como otros coronavirus tales como el MERS, el SARS causan infecciones agudas grave e incluso mortalidad, y por eso deben ser permanentemente contrarrestadas como la influenza que, después se volvió endémica y se mantuvo controlada vía vacunal.

Quisiera aclararte algo: el MERS y el SARS se lograron contener y no alcanzaron una escala pandémica, pero ellos no tienen vacuna. Es muy sencillo: las vacunas pediátricas le salvan la vida a los niños y la idea que persigue la vacunación del Sars-Cov-2 es la misma: salvar vidas.

Inmunidad de rebaño

ENS: ¿Tiene sentido hablar de inmunidad de rebaño?

AR: Pensar en una inmunidad de rebaño es cada vez más difícil porque con la transmisibilidad de la variante Delta la inmunidad de rebaño se dará cuando lleguemos al 90% de los vacunados (prácticamente toda la población) y esa es una meta difícil. Ni siquiera en Estados Unidos, en donde tienen un promedio de 3 a 4 dosis por habitante, se ha alcanzado ese nivel de inmunidad porque hay un movimiento antivacunas altísimo.

Adicionalmente, por más de que estemos vacunados podemos infectarnos nuevamente y eso va en contra del principio de la inmunidad de rebaño. La vacuna tiene un efecto importantísimo sobre la mortalidad y ocupación de UCI pero no sobre los infectados y en ese sentido Israel es un excelente ejemplo.

ENS: La alcaldesa Claudia López pidió aumentar la inmunidad de rebaño al 90%. ¿Qué tanto sentido tiene mover la barra 20 puntos porcentuales más?

AR: Tiene todo el sentido para Bogotá, Colombia y todos los países del mundo. Esa es una recomendación epidemiológica. Ya está muy medido que con la variante Delta circulando el umbral de la inmunidad de rebaño subió y esa es la cantidad de personas que se necesitan vacunadas.

Entonces mismos porcentajes: con la variante salvaje de Wuhan, que tenía una tasa reproductiva de 3, se necesitaba una inmunidad del 70% de la población para disminuir la velocidad. Si la tasa aumentaba a cinco sabíamos que la inmunidad debía subir a 80%, pero al llegar a 8 (Delta), toca tener la inmunidad del 90%.

Este es un concepto teórico claro porque está directamente relacionado con la modificación del número reproductivo del virus, y a mayor transmisión mayor porcentaje de personas que deben estar vacunadas para disminuir su velocidad.