PEDOFILIA y pornografía infantil son, entre otros, los delitos que se le imputan a Aldo Amaya Ruiz, el hombre de 58 años que fue capturado por la Policía Nacional en la vía que de Bogotá conduce a Mesitas del Colegio.
El colombiano de 58 años de edad, tenía notificación azul de Interpol y en su vivienda, al sur de Bogotá, donde fueron rescatadas tres menores de edad que hacían parte de su grupo familiar y de quienes presuntamente abusaba sexualmente, fueron encontrados fotografías y videos con contenido explícito de abuso sexual de menores.
Interpol Colombia en coordinación con la Fiscalía General de la Nación realizaron la Operación San Gabriel luego de semanas de seguimiento y tras recibir una alerta desde Washington (Estados Unidos) sobre la existencia de material digital con contenido de abuso sexual a menores en la Dark Web (Red Oscura) de Internet. Con la información de la Base de Datos Internacional sobre Explotación Sexual de Niños (ICSE) por sus siglas en inglés, realizaron un trabajo exhaustivo de análisis forense y de investigación criminal con el que lograron ubicar, individualizar e identificar a este pederasta que habría cometido tan perturbadores hechos.
A Amaya Ruiz se le imputan los delitos de acceso carnal abusivo con menor de 14 años, acto sexual con menor de 14 años y pornografía con menores, además, de presunto abuso sexual de las tres menores de edad con las que fue encontrado.
Según los elementos materiales probatorios y evidencia física recopilados, el presunto abusador habría subido a la red de internet alrededor de 379 imágenes y videos con contenido explícito de abuso sexual de menores, en los que aparecía él, en reiteradas ocasiones cometiendo vejámenes y aberrantes actos contra las tres menores, a quienes coactaba por medio de ofrecimientos de dádivas como teléfonos celulares, dinero, alimentos y paseos a balnearios, con el fin de que no dieran aviso a sus madres o familiares.
La investigación arrojó información relevante con la que se pudo evidenciar que esta persona tenía archivos digitales con contenido pedófilo desde mediados del año 2011; durante la diligencia de registro y allanamiento practicada a una de las propiedades de él, ubicada al sur de la ciudad de Bogotá, se pudo comprobar que el lugar en el que se habían realizado los videos y fotografías, era el mismo allanado y que esos hechos fueron llevados a cabo desde el año 2021.
Durante la captura de este pederasta y el allanamiento a su vivienda, le fueron incautados un disco duro y tres teléfonos celulares de su propiedad, los cuales son objeto de análisis forense digital con el fin de obtener más evidencias e identificar más posibles víctimas, además de determinar si existía la complicidad o complacencia de terceras personas en hechos reprochables.
Los videos y fotografías con contenido explícito de abuso sexual de las menores eran distribuidos a través de la Dark Web, llegando a Estados unidos y otros países, en donde las imágenes eran compartidas en diferentes grupos y redes sociales alimentadas por otros pedófilos quienes buscan satisfacer sus deseos aberrantes.
Dentro de las diligencias judiciales realizada por los investigadores también se llevó a cabo el rescate y restablecimiento de los derechos de las tres víctimas, quienes fueron dejadas bajo la protección del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF).
Amaya Ruiz o fue presentado en audiencia virtual ante un Juez de Control de Garantías, quien dio legalidad a su captura y a la diligencia de allanamiento, una vez imputados los cargos por la Fiscalía General de la Nación, el juez decidió enviarlo a un centro carcelario con medida de aseguramiento privativa de la libertad.