Confusión en Bogotá y otras ciudades. Alud de registros de empresas para validación que les permitirá reapertura. Salvo en Barranquilla, sistemas masivos de transporte cumplieron con norma de no exceder 35% de capacidad
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En medio de la expectativa por la reactivación paulatina del aparato productivo, ayer fue un día confuso para algunas personas que salieron de sus casas pensando que se había terminado la cuarentena.
En Bogotá, por ejemplo, hasta las 5 de la tarde se habían impuesto 470 comparendos pedagógicos a personas.
A pesar de que esa situación implicó un cierto desorden en varios lugares del país, en general el panorama fue menos caótico de lo que hubiera podido ser.
En primer lugar, ya hay más de 4.000 empresas en el país que se encuentran validadas y listas para iniciar el proceso de reactivación, afirmó el ministro de Comercio, Industria y Turismo, José Manuel Restrepo, quien agregó que “en los próximos días, una vez surtidos los últimos trámites ante las alcaldías locales, podrán entrar en operación”.
Restrepo hizo énfasis en que, en el sector manufacturero, donde se esperan unas 96.000 empresas, ya el 20% “se encuentra inscrito en los distintos municipios del país, con su plan de implementación de protocolos”.
“La mayoría de los municipios del país han estado recolectando información, recolectando la información de esos planes de cumplimiento de los protocolos; han venido haciendo, también, pruebas piloto, y tienen programados varios días en materia pedagógica con los sectores productivos de la economía”, subrayó.
En ese mismo sentido, reconoció el esfuerzo realizado por las administraciones locales en la validación de esos protocolos.
“Es de resaltar los esfuerzos de validación que se han venido desarrollando en las ciudades de Medellín, Barranquilla y en algunas zonas industriales del departamento de Cundinamarca”, recalcó.
“Vamos avanzando, cumpliendo también con esa obligación dentro de la reactivación gradual y progresiva de que exista la validación, por parte de las alcaldías, de los protocolos de bioseguridad”, subrayó.
En Bogotá, la alcaldesa Claudia López informó que desde que se habilitó la plataforma www.bogotá.gov.co/reactivación-económica se han registrado 32.000 ingresos al formulario del sector manufacturero y 16.000 al de obra.
Los registros finalizados y enviados a revisión por parte del sector manufacturero llegaron a 1.273, de obra pública 63 y de edificaciones privadas 312.
Este mismo procedimiento en Cali se denominó Pasaporte Sanitario Digital, al cual se acogieron durante la primera jornada de inscripción, según datos suministrados por Juan Diego Flórez, secretario de Infraestructura, un total de 40 empresas y 10.000 trabajadores que ingresaron al sitio web de la Alcaldía para recibir la autorización que les permita regresar a sus labores.
Transporte masivo
Fue en Cali donde se registraron más confusiones, porque al malentendido de que todos los trabajadores podían volver a sus labores se sumó la vigencia del ‘pico y cédula’, medida control basada en los dos últimos dígitos del documento de identidad para salir a las calles para compras de alimentos y diligencias en entidades financieras.
Así, el desorden se pudo percibir en el transporte público, pues aunque el Masivo Integrado de Occidente (MIO) solo podía llevar el 35% de su capacidad, no pocos buses tenían pasajeros de pie.
Pero la alerta mayor la encendió la secretaria de Salud, Miyerlandi Torres, debido a la afluencia de personas que salieron a las calles sin el uso de tapabocas.
"Estamos muy preocupados porque hemos visto mucha gente en la calle, sin protección y sin acatar las recomendaciones que hemos establecido. Vemos gente sin tapabocas, muchas aglomeraciones en las estaciones del transporte masivo", indicó.
En la Capital, según la alcaldesa López, Transmilenio se movió con total normalidad y con una ocupación del 20% en sus componentes troncal, zonal y cable.
Con corte a las 8 de la noche, el sistema había movilizado 341.560 personas en los buses articulados, 366.841 en el Sistema Integrado de Transporte Público (SITP) y 5.841 en Transmicable. En total se transportaron 714.224 personas.
Los reportes en el Metro de Medellín también fueron buenos, de acuerdo con lo informado por la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá: el 99,9% de los pasajeros cumplió con el uso de tapabocas, mientras que el promedio en los tiempos de espera fue de 20 a 40 minutos en las estaciones más concurridas, como Niquía, Bello, Acevedo, Caribe y Hospital.
También Bucaramanga fue escenario de aglomeraciones en el servicio de transporte masivo Metrolínea, lo que ocurrió según voceros de la empresa porque los operadores no quisieron sacar más flota para la operación.
En Barranquilla y Soledad, Transmetro tampoco se estaba cumpliendo con la restricción de operar con el 35% de la capacidad.
De acuerdo con lo denunciado por los usuarios a través de redes sociales, los buses circulaban con sobrecupo, lo que aumentaría el riesgo de propagación del coronavirus para los trabajadores que retornaron a sus actividades laborales.
Sin embargo, cuando se quiso evitar el sobrecupo los usuarios protestaron. Eso ocurrió en el barrio La Central, de Soledad, donde fue retenido un vehículo luego de que el motorista indicara que, de acuerdo con las nuevas medidas del Gobierno nacional, los buses de Transmetro no pueden ir con sobrecupo.
“La comunidad hizo caso omiso a las indicaciones del operador y retuvo el vehículo hasta que todos se subieran. El bus llegó con sobrecupo al Portal de Soledad. Reiteramos el llamado a cumplir con las medidas dispuestas por las autoridades para garantizar un servicio de calidad”, trinó la empresa.
Bloqueo en Córdoba
Un grupo de habitantes de Ciénaga de Oro bloqueó la troncal que comunica a Córdoba con el resto de la Costa Atlántica, ubicando troncos, ramas, llantas y otros objetos con el fin de formar una barricada que impidiera la circulación de los vehículos que transitan por la vía.
Si bien es cierto que el tráfico se ha reducido, debido al aislamiento obligatorio y a las medidas tomadas por el Gobierno con relación a la movilidad, en la vía se quedaron represados varios camiones que transportaban alimentos para abastecer a las principales centrales de la zona.