A través de un comunicado, la entidad aseguró que continúa trabajando con diferentes entidades para subsanar las inquietudes surgidas por la autoridad ambiental, frente a uno de los proyectos más relevantes para la movilidad de la región metropolitana de Bogotá y del país.
“Por tal motivo, independientemente de la decisión que fuera a emitir la ANLA, y como parte de los posibles escenarios de otorgamiento o archivo de la licencia, la Concesión contrató una firma internacional con experiencia y exitosa trayectoria en el desarrollo de Estudios de Impacto Ambiental”, aseveró.
En el documento señalan que el proyecto no contempla obras sobre los humedales o el entorno natural y que, por el contrario, estipula un riguroso plan para restaurar los ecosistemas y proteger la fauna y flora existente.
Así mismo, la concesionaria informó que obras planteadas tienen como propósito mejorar la conectividad hidráulica y contribuir con la restauración de estos ecosistemas indispensables para el medio ambiente.