Así fue: Terrorista arrolló policía y activó 80 kilos de pentolita | El Nuevo Siglo
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Jueves, 17 de Enero de 2019
Redaccion web con Anadolu

Confusión, caos y terror es lo que se vivió a partir de las 9:35 en en la Escuela de Cadetes de la Policía General Santander, ubicada en el sur de Bogotá, donde un sonido atronador rompió la tranquilidad del sector.

Según la información prelimintar y luego confirmada por el propio fiscal general, Néstor Humberto Martínez, una camioneta Nissan Patrol gris, modelo 1993,  con matrícula LAF565cargada con 80 kilos de pentolita, llegó  al puesto de guardia de entrada de la Escuela de Cadetes General Santander, donde fue detenida para el respectivo control de seguridad. Una vez allí, el perro que acompañaba a uno de los agentes policiales de seguridad se inquietó, detectando así los explosivos y cuando el terrorista, identificado como José Aldemar Rojas Rodríguez, se vio descubierto decidió acelerar el carro, arrollando y matando instantáneamente a uno de los guardias de seguridad.

Los otros tres uniformados asignados a la garita de ingreso corrieron tras el vehículo que recorrió varios metros y después chocó contra el edificio de alojamientos, lo que provocó la activación de los explosivos, matando "in situ" al conductor Rojas y a los tres uniformados que los perseguían. De igual forma a otros tres jóvenes que se encontraban al ingreso de la edificación e hiriendo a 65 más. Uno de éstos, por la gravedad de sus heridas, falleció antes de llegar al Policlínico del Sur a donde era trasladado.

De la totalidad de los heridos son varios los que se debaten entre la vida y la muerte.

 

Si bien se ha identificado al autor material de este atentado contra la policía, se desconocen tanto los motivos como los autores intelectuales. Sorprende que el acto fuera cometido en una modalidad conocida como "kamikaze", es decir el acto de un suicida que es muy  común en ataques  perpetrados en otros lados mundo (Europa y Medio Oriente)., pero que hasta ahora no se había registrado en el país.

 

Vea también: Solo y con explosivos, ¿una nueva modalidad?

La versión entregada por la Fiscalía confirma el relato que una testigo, al interior de la Escuela, había hecho horas antes sobre la forma como actuó el terrorista Rojas. Ella había narrado a los medios que  "La camioneta de platón se detuvo en la guardia y mientras la inspeccionaban el perro detectó el explosivo. Fue entonces cuando el conductor aceleró atropellando, pasando por encima de uno de los policías de la guardia y los otros tres agentes corrieron tras la camioneta que enseguida chocó contra el alojamiento y explotó. Los tres policías que iban tras ella fallecieron ahí".

Vale descartar, sin embargo, que el hecho no es ni fortuito ni realizado por una sola persona. Todas las autoridades y expertos coinciden en señalar que tras este hombre que se inmoló hay autores intelectuales y todo un plan, porque un carro-bomba con la cantidad de explosivos que tenía,80 kilos de pentonita, no se prepara de un momento para otro, además de que se requiere tanto de dinero como  "inteligencia".

"Entró abruptamente, casi atropellando a los policías y  enseguida fue la explosión", comentó Fanny Contreras, funcionaria de salud de las Fuerzas Militares.La explosión fue tan potente que generó ruptura de vidrios en tres cuadras a la redonda.

El hecho generó repudio nacional que golpea el corazón de la policía, como lo dijo un vocero de la institución. Los organismos de seguridad realizan las respectivas investigaciones y no descartan entre las hipótesis que  acababa de concluir una ceremonia interna.

Los heridos fueron trasladados  al Hospital Central de la Policía,  al hospital El Tunal, al Hospital de Kennedy y al Policlìnico del Olaya, donde varios de ellos son sometidos a cirugías y el personal médico intenta salvarles la vida.

Ocho de los heridos fueron remitidos al Hospital de El Tunal, tres al Policlínico del Olaya, dos al Hospital de Kennedy y otros 28 al Hospital de la Policía.
 

Personas que se encontraban transitando por el lugar narraron que escucharon un estruendo y posteriormente vieron al interior de la Escuela una gran humareda. Acto seguido comenzaron a desplegarse carros policiales y ambulancias.

Los mismos testigos creyeron que la explosión había sido un accidente al interior de la Escuela Policial y en medio del temor manifestaron su estupor al conocer que fue un atentado.

 

EU condena y ofrece apoyo

De otra parte, Estados Unidos expresó sus condolencias a Colombia por el "repudiable" ataque con coche bomba ocurrido en una academia de policía en Bogotá, que causó al menos nueve muertos, y ofreció su ayuda para investigarlo.

La subsecretaria de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental, Kimberly Breier, manifestó la solidaridad del gobierno de Donald Trump tras el atentado, que fue calificado por autoridades colombianas como "terrorismo".

"Estados Unidos condena el ataque a la Policía Nacional de la Escuela General Santander de Colombia. Nuestras condolencias para las víctimas y familiares de los muertos. Nos solidarizamos con nuestros amigos y aliados, la gente y la policía de Colombia", escribió en inglés la funcionaria en su cuenta en Twitter.

Breier retuitéo además un mensaje similar en español publicado por la embajada estadounidense en Bogotá, que brinda colaboración al gobierno de Iván Duque para las pesquisas. "Ofrecemos nuestra asistencia en la investigación de este acto repudiable y nuestra solidaridad a la Policía de Colombia", indicó el texto.

 

Farc rechazó el atentado

El partido Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (Farc) publicó un comunicado en el que condenó el atentado ejecutado con un carro bomba en la Escuela de Cadetes General Santander de Bogotá.

"Expresamos nuestra solidaridad a las víctimas y sus familiares y convocamos a todos los sectores del país persistir en la construcción de un pacto nacional que saque la violencia y las armas del ejercicio de la política", subrayó el documento de la Farc. 

El partido político de izquierda dijo que “ante la gravedad de lo ocurrido y sus repercusiones”, las autoridades deben establecer en el menor tiempo posible -y con toda claridad-, los responsables del mismo.

“Este hecho, genera incertidumbre en medio de un creciente despertar de la movilización social, en rechazo a las políticas gubernamentales, y el repudio generalizado al asesinato de líderes sociales y exguerrilleros, que aún no encuentran respuesta asertiva por parte del gobierno”, añadió el comunicado de la Farc.

“A pesar del comprensible dolor que causa este tipo de violencia, el gobierno nacional y el país, no puede dejarse llevar por la histeria guerrerista y las soluciones militaristas. La paz por la vía del diálogo es el camino; la experiencia de las últimas décadas así lo demuestra, otro tipo de soluciones no hacen más que aumentar el número de víctimas, que ya suman millones”, concluyó el texto.