Uganda comenzó a votar para elegir diputados y presidente, en unos comicios en los que el actual mandatario Yoweri Museveni, en el poder desde hace 30 años, se presenta como favorito frente a una oposición dividida.
Los 28.000 colegios electorales debían abrir sus puertas a las 07H00 hora local (04H00 GMT) y cerrar a las 16H00, aunque en la capital Kampala varios de ellos seguían cerrados más de una hora después del horario de apertura previsto, debido a que el material electoral no había llegado, según una periodista de la AFP.
Un conductor de moto-taxi, Etima Karim, de 35 años, dijo que esperaba una victoria del principal candidato opositor, Kizza Besigye.
"Necesitamos que cambie las cosas, la salud, los hospitales, las carreteras," explicó, mientras esperaba impaciente la apertura del centro de votación en el barrio de Kololo.
Más de 150.000 miembros de las fuerzas del orden estaban desplegados en todo el país este jueves, según la comisión electoral.
El acceso a internet era inusualmente difícil en Kampala, donde muchos se quejaban de las dificultades para acceder a las redes sociales, como Facebook y WhatsApp. De momento no se dio ninguna información sobre las razones de estos problemas.
Los ugandeses deben elegir a 290 diputados y decidir si mantienen o no en el poder a Museveni, de 71 años, que opta a un quinto mandato de cinco años, frente a otros siete candidatos.
Las encuestas predicen una victoria en primera vuelta - con 51% de los votos - del jefe de Estado saliente, que goza de gran popularidad en el país y cuenta con el apoyo financiero de su partido, el Movimiento de Resistencia Nacional (NRM).
La oposición, pese a que no logró ponerse de acuerdo sobre una candidatura única, espera por lo menos que haya una segunda vuelta, algo inédito en ese país que nunca ha vivido una alternancia política pacífica desde su independencia en 1962.
Kizza Besigye, opositor histórico y principal rival de Museveni, estima tener posibilidades, pese a que en los últimos tres comicios (2001, 2006, 2011) fue derrotado en primera vuelta.
"Esta elección no puede ser libre ni justa, pero eso no significa que no podamos ganarla", declaró el martes a la AFP.
Besigye, ex médico personal de Museveni y varias veces ministro, cuenta con una gran popularidad en las ciudades y entre los jóvenes, afectados por un desempleo masivo. Sin embargo, no cuenta con los recursos del NRM, acusado por muchos de clientelismo.
La otra amenaza para Museveni es Amama Mbabazi, primer ministro entre 2011 y 2014, luego caído en desgracia y cesado por su rivalidad con el jefe del Estado. No obstante, su proximidad pasada con el poder podría pasarle factura.
Yoweri Museveni, un ex guerrillero carismático a la vez autoritario y afable, nunca ha dejado entrever la más mínima intención de dejar el cargo, pese a haber denunciado de joven a los dirigentes africanos que "quieren quedarse demasiado tiempo en el poder".
El mandatario llegó al poder en 1986 tras tomar Kampala al frente de su Ejército de Resistencia Nacional (NRA), y trajo estabilidad al país después de los períodos violentos de Idi Amin Dada y Milton Obote.
Además se ha impuesto como un importante actor regional, con su firme apoyo a la fuerza de paz de la Unión Africana en Somalia (AMISOM).