La producción de petróleo de Colombia, que en los últimos siete meses se ha mantenido por encima del millón de barriles diarios, no podría mantenerse a mediano plazo. Esta situación se desprende debido al desplome de la exploración de pozos durante este año y a factores coyunturales del mercado en el extranjero, como el aumento de la producción de Estados Unidos y la oferta exploratoria por parte de México.
Estos hechos quedan a la luz, luego de hacerse público el último informe de Fedesarrollo, denominado “Coyuntura Petrolera”, cuyo editor fue el economista Mauricio Reina. En el análisis queda al descubierto que aunque las autoridades energéticas y el mismo sector petrolero han dicho que la principal fórmula para enfrentar la caída en los precios del crudo es el incremento en la producción, pues les ayuda a capotear la caída en los ingresos y permite mantener algunas actividades de exploración, el ritmo de extracción del país puede verse afectado, a la baja, en los próximos años.
Indica el estudio que sin duda la nueva realidad, en la que los precios del petróleo dependerán básicamente de la capacidad de Estados Unidos de mantener su nivel en un entorno de bajas cotizaciones, y a la reacción que puedan tener Arabia Saudita y otros países exportadores frente a las importaciones del país norteamericano, se suma un panorama ‘poco promisorio’ de la producción de crudo local.
Señala que la intempestiva caída en las cotizaciones internacionales de petróleo ha alterado las perspectivas del sector hidrocarburos en materia de exploración y producción. El efecto más fuerte se ha sentido en las actividades exploratorias, tales como la sísmica y los pozos exploratorios.
De acuerdo con el Informe Estadístico Petrolero de la Asociación Colombiana de Petróleos, la actividad exploratoria presentó una fuerte contracción en los primeros meses del 2015, frente al mismo periodo de 2014.
En materia de sísmica, entre enero y abril de 2015 se ejecutaron cerca de 800 kilómetros equivalentes, frente a los cerca de 10.000 observados en el mismo periodo en 2014, significando una caída del 92%. En lo que respecta a la actividad de pozos exploratorios, entre enero y abril de 2015, se perforaron 9 pozos, 41 menos que en el mismo periodo de análisis en 2014, lo que constituye una caída del 82,6%.
En lo que se refiere a la producción de crudo, la Asociación Colombiana de Petróleos ha sostenido que para 2015 es factible mantener los niveles por encima del millón de barriles diarios. Sin embargo, dicha agremiación advierte una eventual contracción del orden de 100.000 y 250.000 barriles en 2016 y 2018, respectivamente.
Como mecanismos que permitan contrarrestar esta tendencia, la entidad ha propuesto cuatro medidas de políticas públicas que aliviarían la situación al sector: i. Contratos con mayor flexibilidad en el corto plazo, que permitan la ejecución de inversiones en exploración y producción; ii. Mayor celeridad en el licenciamiento ambiental; iii. Canalización de la inconformidad social sin realizar bloqueos a la infraestructura petrolera; y iv. Beneficios tributarios que permitan ampliar las oportunidades de inversión en el sector.
Junto a estas medidas, una eventual recuperación en el precio del petróleo permitiría dinamizar las inversiones en el sector, mediante el incremento en las actividades de exploración y la viabilización de proyectos de recursos no convencionales.
En ese sentido, es importante evaluar las perspectivas de desempeño del sector en cuanto al comportamiento esperado de los precios internacionales y a la posición regional que tiene el país en términos de la competitividad de la industria petrolera.