La leyenda olímpica Michael Phelps dijo que se "sentía como un niño" de nuevo después de su primera competición en 20 meses, y con ganas de ver hasta dónde llegará esta nueva aventura en las piscinas.
"En general, me sentí bastante bien sólo siendo capaz de volver al agua y la competencia de nuevo", dijo Phelps el viernes, después de cerrar su aparición en el Gran Premio de Mesa nadando en la poco familiar distancia para él de los 50 m mariposa.
"Estoy muy emocionado", aseguró Phelps, cuyas 22 medallas olímpicas incluyen 18 de oro. "Me sentí como un niño. Creo que esa fue la parte más grandiosa de ello".
En su primera incursión en una piscina desde que triunfó en Londres-2012, el 'Tiburón de Baltimore' marcó el mejor tiempo de clasificación en los 100 m mariposa el jueves y qudó segundo en la final de esa prueba, lo que evidencia su enorme talento.
Phelps es el actual recordista mundial y tres veces campeón olímpico en los 100 m mariposa.
El viernes los aficionados pudieron disfrutar de una rareza: Phelps en una carrera de 50 metros.
Phelps optó el viernes por nadar los 50 m mariposa en las preliminares, que para él pareció ser más un recorrido de entrenamiento que una carrera.
Su tiempo de 24,06 segundos le ubicó séptimo en su serie y 42º en la general, pero su entrenador, Bob Bowman, dijo que Phelps tomaría esta prueba para pulir su técnica y medir su velocidad en una vuelta al estilo mariposa.
Pese a ello, su marca fue siete décimas de segundo más rápida que su vuelta parcial en los 100 mariposa, a pesar de que Phelps reconoció habr tenido problemas con el ritmo frenético de la prueba de una vuelta.
Según Phelps, el principal objetivo de los 50 m el viernes era sólo conseguir en una carrera más en su reacondicionamiento para el regreso a las piscinas.
En este punto de su entrenamiento, dijo no sentirse listo para afrontar los 200 metros libre programados el viernes, y tampoco los 200 mariposa y los 100 libres.
"El programa (de la competencia) no era ideal para lo que debería nadar en este mismo momento", dijo Phelps.
Phelps ha tratado de calmar las expectativas sobre sus probabilidades de clasificarse para los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016.
Él ha sido bastante conservador sobre cómo aprovechar esta etapa de su carrera, a pesar de que parece estar apuntando hacia pruebas más cortas como los 100 m mariposa.
Una cosa es cierta, no habrá otra campaña olímpica de varias medallas como su impresionante demostración en los Juegos de Pekín-2008, cuando se colgó ocho metales de oro en ocho eventos.
Y Phelps, que en el apogeo de su carrera dominó los 400 m combinado individual, aseguró ahora que un regreso a ese evento exigente está también fuera de la mesa.
"Te garantizo eso", dijo a un pregunta de un reportero, lo que provocó una interjección rápida del entrenador Bob Bowman.
"¿Eso es algo así como decir 'Nunca voy a nadar de nuevo', cierto?", preguntó Bowman dibujando una sonrisa.
Phelps no está ofreciendo garantías absolutas. Sólo se limitó a decir que su siguiente parada en la serie Gran Prix de Natación de Estados Unidos será el Charlotte UltraSwim en mayo.
"Se apuntó a Charlotte, donde tal vez haga lo mismo que acá en Mesa. Más allá de eso, todavía falta un poco de entrenamiento y vamos a ver qué pasa después de eso", subrayó Bowman./AFP