"Las drogas pueden cambiar tus planes. Métele mente y decide" es el eslogan de la nueva Campaña Nacional de Prevención del Consumo de Drogas promovida por el Gobierno de Colombia y la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito -UNODC-, la cual se enmarca en Plan Nacional para la Promoción de la Salud, la Prevención y la Atención del Consumo de Sustancias Psicoactivas 2014-2021.
La campaña, que incluye piezas para televisión, radio e impresos, reconoce a los jóvenes como personas capaces de tomar decisiones en beneficio de ellos mismos y de su comunidad. La campaña muestra situaciones cotidianas en donde una persona joven ha dejado un "espacio vacío" y ha fallado a su pareja, amigos, familiares o a sí misma. ¿Por qué la ausencia del joven? Porque las drogas le cambiaron sus planes.
La baterista que no asistió al primer concierto de su banda; el muchacho que dejó plantada a su novia; la chica que no se presentó a las pruebas de admisión de la universidad; y un joven que dejó esperando a su familia en el cumpleaños de la abuela, materializan situaciones en las que una decisión desacertada frente a las drogas afectó el entorno familiar, personal y social.
MÉTELE MENTE Y DECIDE
La campaña no se queda en los efectos del consumo de drogas. Es fundamental la segunda parte del mensaje: Métele mente y decide. "Métele mente" es un juego de palabras para que antes de "meter" los jóvenes reflexionen sobre las posibles consecuencias y tomen una decisión informada. "Ese es el componente clave de la prevención: la capacidad de reflexión y decisión que tenemos los seres humanos frente al consumo de drogas", dice Yesid Reyes, el Ministro de Justicia y del Derecho, institución que lidera la campaña junto al Ministerio de Salud y Protección Social.
Aunque el enfoque son los jóvenes, la campaña va a dirigida a la sociedad en general, ya que la responsabilidad en la prevención del consumo de drogas debe ser compartida entre todos: Estado, comunidad, familia, amigos, educadores. Por ello uno de los fundamentos de la campaña es la corresponsabilidad, asociada al efecto de mis decisiones como individuo o como miembro de una sociedad.
¿Quiénes entonces comparten esa responsabilidad? Por un lado, el joven; y por otro, su familia y redes de apoyo (sean profesores, compañeros, amigos). Si el joven no cuenta con la guía y afecto de esas redes, es más vulnerable ante la presión de grupo y la ambición de experimentar a través de las drogas.
La campaña también está fundamentada en el enfoque de Habilidades para la Vida que promueve la Organización Mundial de la Salud y UNODC, como son el autoconocimiento, la toma de decisiones y la comunicación asertiva.
"Es una apuesta interinstitucional donde el Gobierno y la Cooperación Internacional tienen en cuenta los debates actuales sobre prevención del consumo de drogas que involucran la capacidad de decisión y los riesgos que tiene el consumo en el presente y el futuro de las personas, así como en la vida de quienes nos rodean", afirma Bo Mathiasen, Representante de UNODC.
El tono de la campaña rompe paradigmas frente a lo que tradicionalmente se ha divulgado porque tiene un enfoque de derechos, sin juzgar o amenazar a los jóvenes sino invitándolos a pensar antes de tomar una decisión que pueda afectar su proyecto de vida.
Detrás del consumo de drogas hay muchos factores que intervienen y que comprometen no sólo a los jóvenes sino a sus familias, educadores, referentes y también al Estado. Si se quiere volver a llenar esos "espacios vacíos" que dejan los seres queridos como lo muestra la campaña, es necesario actuar con afecto, inteligencia y comprensión.
Un primer paso es hablar del tema con los hijos, familiares o alumnos cuando salga alguno de los anuncios de esta novedosa campaña, escucharlos e intercambiar ideas sobre cómo tomar decisiones acertadas.