Ante la grave situación que se presenta en el departamento de San Andrés, Providencia y Santa Catalina por la acumulación de cerca de ocho toneladas de residuos hospitalarios, la Procuraduría solicitó a la autoridad territorial la adopción de medidas inmediatas que permitan conjurar esta crisis ambiental, en aras de proteger la salud pública y los derechos colectivos.
En comunicación dirigida a la gobernadora Aury Socorro Guerrero Bowie, el procurador delegado para Asuntos Ambientales y Agrarios, Oscar Darío Amaya Navas, planteó la preocupación que le asiste al Ministerio Público por las condiciones de los residuos hospitalarios localizados en diferentes sitios de la Isla, y especialmente en los patios del actual Hospital Departamental de San Andrés, los cuales se encuentran en contenedores, bidones y bodegas, sometidos a altas temperaturas y sin ningún manejo ni tratamiento especializado.
Al respecto el procurador delegado citó apartes de un concepto de la Corporación Autónoma Regional Coralina, según el cual "el área de almacenamiento de los residuos hospitalarios adolece de una restricción para personal no capacitado en el tema, al igual que de una señalización visible y clara, con letreros alusivos a la peligrosidad de los mismos", y señaló que para la implementación de las medidas que se adopten para solucionar la crisis se debe contar con la participación de los generadores de los residuos y de la autoridad ambiental de la Isla, garantizando el cumplimiento de la normatividad y de los protocolos vigentes.
Se advierte en la citada comunicación que para el Ministerio Público resulta inaceptable el alto volumen de residuos hospitalarios que se han acumulado en la Isla, sin asomo de una solución definitiva a esta grave problemática ya advertida en años anteriores.