Marco legal, freno a alianzas entre los partidos pequeños | El Nuevo Siglo
Domingo, 7 de Abril de 2013

Una tercería para que los partidos minoritarios puedan participar en las elecciones del Congreso sin temer por el umbral del 3 por ciento, es lo que se está agitando entre los movimientos que están en peligro frente a los comicios de 2014.

El exministro Antonio Navarro, vocero del movimiento Progresistas que llevó a Gustavo Petro a la Alcaldía de Bogotá, le dijo a EL NUEVO SIGLO que se están buscando unas coaliciones entre los sectores alternativos del país: “Hay dificultades legales. Hoy por hoy, como están las normas, no existen espacios para que los grupos que se quieran unir lo puedan hacer”.

Por eso lo que se está  proponiendo es que se apruebe una norma de coalición, que permitan que fuerzas diversas puedan participar conjuntamente en las elecciones del 2014.

Navarro expresó que de ese tema se ha venido hablando con el Gobierno de manera repetida, pero aún no se logra que haya claridad del interés de impulsar ese proyecto de ley.

“El tema urgente es como garantizar la participación de unos grupos políticos que quieren participar en una tercería para los cuerpos colegiados, en el Senado y la Cámara de Representantes”, dijo.

Anotó que no se busca que el umbral se baje, sino que se les permita hacer coaliciones: “Ese es el punto fundamental. Lo que se necesita es una la voluntad de los partidos de políticos”.

Indicó que ya el ministro del Interior, Fernando Carrillo, y el presidente Juan Manuel Santos saben del tema.

El senador Luis Carlos Avellaneda, elegido con aval del Polo Democrático pero afín a Progresistas, explicó que la idea surgió porque el panorama político para muchos partidos está muy oscuro debido al aumento del umbral al 3 por ciento, lo que significa una votación cercana a los 450.000 sufragios.

“Muchos partidos como Cambio Radical, MIRA, Verde, PIN, Marcha Patriótica, Progresistas no podrían sacar ese umbral y prácticamente desaparecerían del mapa político. Y por eso hay que desarrollar la reforma política que hablaba de la fusión, de la liquidación de partidos y de escisión”, precisó.

Por su lado, tanto el senador Carlos Alberto Baena, presidente del Movimiento Independiente de Renovación Absoluta (MIRA), como Alexandra Moreno, congresista de esa colectividad en la cámara alta, descartaron alianzas y recordaron que en las elecciones pasadas también se hablaba del umbral y lo pasaron.

Baena le recordó a este Diario que la lista al Senado de la República será cerrada y la encabezarán, en su orden, los actuales legisladores Moreno, Manuel Virgüez y el propio Baena. El cuarto renglón será para la actual representante por Bogotá, Gloria Stella Díaz, mientras que el quinto será para Heyder Gómez, excandidato a la Alcaldía de Cali; y el sexto para Jacqueline Toloza, excandidata a la Alcaldía de Medellín.

A su turno el senador Samuel Arrieta, copresidente del Partido de Integración Nacional (PIN) expresó que no existe ambiente para una refirma legal ni la considera necesaria porque los partidos minoritarios no tienen dificultad alguna: “Los que tienen problemas son los Progresistas, que no tienen en estos momentos cómo asumir un debate electoral, pero los demás partidos no tenemos ninguna dificultad frente a ese tema”.

El segundo vicepresidente del Senado, Edgar Espíndola, también del PIN, expresó que a la democracia colombiana se le haría un gran favor permitiendo que muchos ciudadanos organizados en forma de partido puedan participar en la vida nacional.

“La violencia en el pasado se generó por la exclusión política que propició el Frente Nacional con la alternatividad en el poder de dos partidos únicamente como el Liberal y el Conservador. Colombia no puede repetir esa historia de sangre y dolor que genero la exclusión de la política de otras fuerzas”, anotó.

Para Espindola, lo que se debe es presentar un acto legislativo para dejar el umbral mínimo como está hoy, y “de esa manera brindar garantías también a las minorías políticas; y de esa manera no volver a parcelar el país en dos partidos que es donde apunta la reforma en este país”.

En opinión del representante huilense Luis Enrique Dussán, de Unidad Liberal, legalmente hacer coaliciones no es posible: “Yo propuse en la reforma política pasada coaliciones de partidos para corporaciones, llámese Senado, Cámara, concejos, asambleas y fuimos derrotados en ese propósito”.

Pero indicó que otra cosa es que se intentará por parte de los partidos minoritarios, como fusionarlos o que creen unos nuevos partidos a partir de otros.

“Lógicamente eso sí se puede hacer, pero el punto aquí es quien renuncia en estos momentos a los partidos”, puntualizó Dussán. 

El viceministro del Interior, Carlos Eduardo Gechem, señaló que todo lo que sea para fortalecer a los partidos políticos hay que estudiarlo.

De acuerdo con el representante vallecaucano Juan Carlos Salazar, que hace unos meses renunció al PIN, está agendado un encuentro con el ministro del Interior, Fernando Carrillo, con él y otros los promotores del proyecto sobre fusión de partidos, que “consiste en un proyecto para que haya alianzas interpartidistas entre colectividades minoritarias para la permanencia de esas organizaciones políticas en el ámbito nacional, particularmente en el Congreso de la República”.

La fusión

Como ya lo ha divulgado este Diario, las propuestas iniciales de trasfuguismo y escisión se transformaron en una de fusión.

El representante Salazar explicó que el proyecto de ley busca la fusión de las minorías políticas para impedir su desaparición y evitar que el país retorne a un periodo bipartidista.

“Si nosotros no garantizamos la permanencia de las minorías, estamos asistiendo a la desaparición de cuatro de los siete partidos” que hoy cuentan con personería jurídica y con votaciones cercanas a los 400.000 votos, aseguró Salazar.

“Aquí nadie se está acomodando. Es una ley para que participen todos los colombianos”, indicó el congresista vallecaucano, agregando que “lo que estamos buscando es una alternativa para que las minorías no desparezcan”.

Como lo ha publicado este Diario, aunque hay sectores legislativos optimistas con la propuesta, que ya no genera la resistencia del trasfuguismo y la escisión, hay otros grupos dentro del Congreso que no creen que haya ambiente para adelantar cambiar las normas de juego a pocos meses de las elecciones de 2014.