El mítico estadio de Maracaná, en Río de Janeiro, acogerá la final del Mundial de Fútbol de Brasil-2014, mientras que el partido inaugural será en Sao Paulo, anunció oficialmente el secretario General de la Federación Internacional (FIFA) Jerome Valcke.
El encuentro inaugural está previsto para el 12 de junio de 2014 y la final será el 13 de julio. En varias ocasiones la FIFA había mostrado su preocupación por el estado de las obras de los estadios brasileños, pero la presidenta Dilma Rousseff ha insistido en que estarán listos a tiempo.
La FIFA también avanzó que el partido por el tercer puesto será en Brasilia y que las semifinales se disputarán en Belo Horizonte y Sao Paulo.
“Brasil es muy especial para mucha gente y para el fútbol. Es el país de la alegría y de la celebración, de gran belleza natural y con un boom económico”, destacó poco antes del anuncio el presidente de la FIFA Joseph Blatter, en su intervención en la sede del organismo en Zurich.
La elección del Maracaná para la final parecía evidente, pero la FIFA no había oficializado la decisión debido a los distintos retrasos que han registrado en las obras de los estadios brasileños.
Para el partido inaugural existía una mayor incertidumbre y se llegó a hablar también del Maracaná y de Río como posibles sedes, pero finalmente la FIFA optó por Sao Paulo.
Las obras de remodelación del Maracaná han estado marcadas recientemente por una huelga, pero el 19 de septiembre los obreros que trabajan en el lugar volvieron tras 19 días de paro, después de una decisión judicial, que había considerado la protesta laboral como “abusiva”.
Las autoridades brasileñas se habían preocupado especialmente por este asunto, ya que el 16 de septiembre se había celebrado el paso de la barrera simbólico de los 1.000 días para el inicio del evento.
El Maracaná, un emblema del fútbol mundial, está en pleno proceso de remodelación y modernización, en unas obras cuyo costo está estimado en 660 millones de dólares.
En el caso de Sao Paulo, el estadio que debería acoger el torneo será el nuevo recinto del Corinthians, el Itaquerao, después de que durante mucho tiempo varios sectores locales quisieran impulsar la candidatura del Morumbí.
“Será un estadio del primer mundo. Es un camino seguro, tranquilo, las obras van a buen ritmo en relación a como estaban hace unos meses”, señaló en declaraciones a la prensa de su país el ex futbolista Cafú, campeón mundo con la Selección en 2002.
Y Río de Janeiro acogerá la final de la Copa de las Confederaciones de 2013, mientras que Brasilia será la sede del partido inaugural.
El organismo que dirige el fútbol mundial también avanzó que las semifinales serán en Belo Horizonte y Fortaleza, y que Recife y Salvador de Bahía completan la lista provisional de ciudades-sede, que será validada en 2012.
Para la Copa del Mundo, que vuelve a Brasil en 2014, 64 años después de la edición de 1950, Belo Horizonte y Sao Paulo acogerán las semifinales, mientras que Brasilia será la sede del partido por el tercer y cuarto puesto.
La Copa de las Confederaciones, que habitualmente se considera un ‘ensayo general’ en el año previo al Mundial, cuenta ya con cuatro equipos clasificados: Brasil (organizador), España (campeón del mundo), Uruguay (campeón de la Copa América) y Japón (campeón de la Copa de Asia).