Manifestación pro reforma migratoria: 8 legisladores presos | El Nuevo Siglo
Martes, 8 de Octubre de 2013

Una marcha a favor de la reforma migratoria en Estados Unidos dejó ecenas de detenidos en el centro de Washington, incluyendo ocho legisladores que buscan romper el bloqueo de la iniciativa en el Congreso.

Los legisladores detenidos, siete hombres y una mujer, incluyen al congresista demócrata Luis Gutiérrez, uno de los más conspicuos promotores de la reforma, señalaron los organizadores.

"Hoy vine a sacrificar mi propia libertad, en beneficio de la libertad de aquellos que no tienen ninguna. Nuestra política migratoria está quebrada y es preciso corregirla ahora mismo", dijo Gutiérrez poco antes de su arresto.

Los legisladores, así como decenas de manifestantes que se encontraban sentados bloqueando una calle frente al Capitolio, sede del Congreso estadounidense, fueron conducidos arrestados con las manos atadas a la espalda con correas plásticas, constató un periodista de la AFP en el lugar.

A pocos metros de distancia, la muchedumbre saludó a cada manifestante arrestado y dedicó un ensordecedor abucheo a los agentes policiales.

"Let them go!, let them go!" (¡Déjenlos ir!), gritaban al paso de cada persona arrestada y conducida a varios furgones blindados, estacionados a un costado.

Una multitud, estimada por los organizadores en alrededor de 10.000 personas (cifra que no pudo ser confirmada por una fuente independiente), se reunió para un mitin en favor de la reforma migratoria en el 'Mall', una explanada en el centro de Washington, y posteriormente marchó hacia el Capitolio.

Entre las incontables pancartas se podían ver las que pedían "Reforma Migratoria AHORA", y "Dignidad y derechos para los inmigrantes".

Contra las deportaciones

La marcha "Camino Americano" fue convocada por diversas organizaciones sociales, sindicales y religiosas, para pedir el fin inmediato de las deportaciones y la aprobación de la reforma migratoria tal como fue aprobada por el Senado.

El Senado, dominado por los demócratas del presidente Barack Obama, aprobó en junio un proyecto que contempla una vía para otorgar, bajo condiciones estrictas y al final de un período transitorio de por lo menos 13 años, la nacionalidad estadounidense a millones de inmigrantes ilegales, en su gran mayoría de origen latino.

Pero la oposición republicana, que controla la Cámara de Representantes, rechaza la propuesta, considerándola una "amnistía" a las personas sin papeles, y se niega a someterla a votación en el plenario.

La marcha en Washington fue el último episodio callejero en favor de la reforma migratoria, luego de las manifestaciones del sábado pasado en más de 160 ciudades estadounidenses.

Este martes, la multitud acompaño inicialmente un espectáculo musical y posteriormente se sucedieron en el escenario representantes políticos y religiosos.

Gutiérrez, el más activo defensor de la reforma migratoria entre los legisladores estadounidenses, recordó en su discurso que la parálisis del gobierno federal no afectó hasta ahora la represiva norma migratoria vigente.

"Este martes serán deportados 1.100 personas. Muchos niños van a llorar. Hoy hay unos 30.000 inmigrantes arrestados en este país. Es posible que el gobierno esté paralizado, pero para nosotros sigue activo y haciendo daño", expresó en español.

Los que se oponen a la reforma, dijo Gutiérrez, "quieren que ustedes se cansen, que ustedes se rindan, que ustedes bajen los brazos. Pero ellos no saben que no nos rendiremos hasta que el Congreso vote la reforma migratoria".

Entre los legisladores arrestados se encontraba el congresista negro John Lewis, quien exhibe una trayectoria de medio siglo en defensa de derechos civiles.

En la marcha era posible ver mayoritariamente banderas estadounidenses, pero también de México, El Salvador, Honduras, Venezuela y Colombia.

Padres e hijos

"Yo nací aquí y me siento estadounidense. Pero mi papá puede ser deportado a El Salvador en cualquier momento. La reforma migratoria es necesaria", dijo a la AFP la joven María Álvarez, de 15 años, quien vestía una camiseta donde estaba escrito "Don't deport my DAD" (No deporten a mi padre).

Álvarez formó parte de un grupo de 36 menores de edad presentados en el escenario y cuyas familias ya fueron o podrán ser divididas por las deportaciones de inmigrantes.

En la multitud, María Saucedo se encontraba acompañada de su marido y de dos hijos adolescentes, ambos nacidos en Estados Unidos./afp