La decisión de incluir las motocicletas en la jornada de día sin carro en Bogotá, que se llevará a cabo este jueves cinco de febrero abrió el debate y despertó el rechazo por parte de los motociclistas que ya adelantaron protestas pacíficas.
De acuerdo con la secretaría del Movilidad, María Constanza García, “la Administración para esta jornada tomó dos decisiones en término de movilidad, la primera unir al día sin carro las motocicletas y la segunda es arrancar la jornada a las cinco de la mañana. ¿Qué nos lleva a tomar la decisión? Pues el comportamiento y la evolución que ha tenido las motocicletas en Bogotá”.
Explicó la funcionaria distrital que “en el año 2003 estábamos hablando que la ciudad tenía registradas 17 mil motos, prácticamente la tenencia de la moto estaba asociada a temas de trabajo, de mensajería, domicilios. Hoy Bogotá registra 423 mil, entonces también es un vehículo para la movilidad individual y adicionalmente tiene unos aportes en la contaminación, que son unos porcentajes importantes frente a diferentes contaminantes, que justifican la razón de la decisión de la Administración”.
Por lo tanto, dice García, “realmente la invitación es que todos los bogotanos utilicemos transportes sostenibles como la bicicleta y el Sistema Integrado de Transporte Público (SITP). A las cinco de la mañana ya uno vive con intensidad la movilidad en Bogotá entre las 6:15 y 7:15 a.m. ya se están realizando 160 mil viajes”.
Para el director del Fenalco Bogotá-Cundinamarca, Juan Esteban Orrego, esta jornada será una prueba de fuego para el transporte público de Bogotá y espera que los sistemas masivos de transporte cubran la demanda.
Sin embargo, uno de los peros que le encontró el dirigente gremial es precisamente sobre el uso alternativo de la bicicleta. Según Orrego aunque han aumentado las ventas de estas, “muchos ciudadanos no la ven como una opción la movilizarse por la inseguridad (39%), la falta de ciclorutas (33%), y de cicloparqueaderos (12%). Faltan mayores políticas de promoción y sobre todo, seguridad para los ciclousuarios que contribuyen con la movilidad de Bogotá”.
Otro de los puntos de quiebre sobre la medida, es la inclusión de las motocicletas, donde Orrego expresó su preocupación por “la falta de claridad de cómo será el control de los motociclistas que tienen permitido circular por la ciudad para el jueves próximo como los mensajeros y los domiciliarios, debido a que algunos no portan un uniforme para el cumplimiento de sus labores o simplemente tiene el carné de la empresa sin el cargo, lo cual generará un esfuerzo adicional por parte de las autoridades distritales”.
El dirigente gremial espera que independiente de la jornada del día sin carro, la Administración Distrital reconstruya la malla vial de Bogotá, unifique y organice el SITP con Transmilenio y mejore los temas de seguridad y conexión de ciclorutas para quienes se quieran movilizar en bicicleta, y sobre todo, logré concientizar a los capitalinos a través de las campañas de cultura ciudadana, ya que la movilidad actualmente se encuentra muy deteriorada.