Madrid teme tensión provocada por independentistas en Cataluña | El Nuevo Siglo
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Lunes, 12 de Junio de 2017
Redacción Web con AFP

La vicepresidenta del gobierno español Soraya Saenz de Santamaría dijo este lunes que es necesario prepararse ante las tensiones y provocaciones alentadas por los separatistas en el poder en Cataluña, que el viernes anunciaron la celebración de un referéndum de autodeterminación.

"Tenemos que prepararnos a una estrategia de tensión por parte de la Generalitat (el ejecutivo catalán) y los partidos independentistas", declaró Soraya Saenz de Santamaría en la televisión publica TVE.

La vicepresidenta lidera desde hace unos meses una "operación diálogo" en la región nororiental de 7,5 millones de habitantes gobernada desde finales de 2015 por separatistas, pero sin éxito.

El viernes el presidente regional catalán Carles Puigdemont anunció que convocará para el 1º de octubre un referéndum unilateral sobre la independencia, pese al veto de Madrid y a la prohibición enunciada por el Tribunal Constitucional.

Puigdemont, que aún debe firmar el decreto de convocatoria, ha prometido lanzar la desconexión del resto de España si gana el "sí" a la independencia. 

Sin embargo, los independentistas no han conseguido ningún apoyo importante a su causa fuera de España.

En Cataluña la alcaldesa de Barcelona Ada Colau no apoya la iniciativa y aboga por un voto con más "garantías democráticas".

"Necesitan tensionar por un lado para aglutinar a los propios", consideró Saenz de Santamaría.

En todo caso, "el Estado, sin una palabra más alta que otra no va a permitir que se celebre (el referéndum) porque es contrario a la democracia, porque es contrario a los derechos del conjunto de los catalanes y del resto de los españoles", dijo la vicepresidenta.

El tribunal constitucional dijo en febrero que "cualquier acto preparatorio del referéndum era ya inconstitucional y podía constituir una desobedencia", recordó la vicepresidenta del gobierno.

Saenz de Santamaría denunció "presiones" sobre los funcionarios que tendrían que organizar el voto.

Cataluña vive desde 2010 un acceso de fiebre independentista, en especial por la anulación por el Tribunal constitucional de parte de un estatuto que le concedía una muy amplía autonomía y el título de "Nación".

Las dificultades generadas por la crisis también alentaron el independentismo.

Pero la sociedad catalana sigue profundamente dividida: cerca de 48,5% de los catalanes están en contra y un 44,3% a favor, según el último sondeo sobre el tema realizado por un centro de estudios que depende del gobierno catalán.

Una mayoría amplia, más de un 70%, está sin embargo a favor de un referéndum que permita zanjar el tema de una vez por todas