La falta de alumbrado público en algunas zonas del Atlántico ha aumentado los niveles de inseguridad, por eso, la Secretaría del Interior de ese departamento viene adelantando estrategias de intervención en 12 municipios mediante cartografías sociales que buscar identificar las zonas problemáticas y mejorar la percepción de seguridad.

El secretario del Interior, Guillermo Polo, explicó que esta metodología cumple un doble propósito: la recolección de información para la realización y actualización de diagnósticos de seguridad y convivencia.

Agregó que se busca prevenir delitos y hechos violentos, además, que las comunidades se apropien de los territorios con el compromiso de cuidar y preservar los entornos.

“Estamos elaborando diagnósticos en seguridad y convivencia ciudadana para la identificación de factores de riesgo de tipo situacional y social que incidan o faciliten la ocurrencia de hechos de criminalidad, violencia y que tiene un efecto en la sensación de vulnerabilidad de los ciudadanos”, indicó Polo.

El programa no solo inspecciona los sectores de mayor vulnerabilidad, sino que además, valida la información con autoridades locales en encuentros comunitarios y con herramientas lúdicas útiles para la priorización y focalización de acciones para la ampliación y mejoramiento del alumbrado público.

A la fecha se han intervenido seis de los 12 municipios priorizados: Palmar de Varela, Polonuevo, Santa Lucía, Suan, Campo de la Cruz y Candelaria. Esta semana se terminará el diagnóstico en Manatí, Ponedera, Repelón, Luruaco, Galapa y Usiacurí.

“Estamos muy complacidos con el apoyo recibido por parte de los alcaldes, comandantes locales de Policía, personeros y algunos concejales de los municipios en la realización de estas actividades comunitarias”, puntualizó el secretario Polo.