Rick Santorum ganó la primaria republicana en Luisiana, sur de Estados Unidos, según proyecciones de los medios, lo que apenas hará menguar la distancia que lo separa de su rival Mitt Romney, quien lidera la liza por la candidatura presidencial para enfrentar a Barack Obama en noviembre.
"Nuestra campaña está haciendo historia", declaró Santorum en un e-mail a sus seguidores momentos después de que fuera anunciado como ganador en el estado sureño por parte de los medios estadounidenses.
A pesar de haber sido aventajado desde el comienzo de la campaña, Santorum, un católico próximo al Opus Dei, ha logrado cosechar 11 victorias en 34 comicios llevados a cabo en diferentes estados del país, en su mayoría gracias al respaldo de los cristianos evangélicos y miembros del ala más conservadora del partido.
"Desde Ronald Reagan en 1976 ningún candidato conservador ganaba tantos estados como nosotros", dijo Santorum.
"La razón por la que nuestra campaña está ganando en estado tras estado es porque el pueblo quiere un líder conservador auténtico y fuerte para hacer frente (al presidente) Barack Obama y no solo alguien que juega a ser un buen conservador", agregó Santorum.
Sin embargo su fracaso a la hora de captar a más votantes moderados hacen dudar acerca de su capacidad para vencer al presidente demócrata Barack Obama en las elecciones presidenciales del próximo 6 de noviembre.
"Durante un tiempo, nos gustó Santorum, pero últimamente se ha vuelto demasiado radical", declaró a AFP Betty Harper luego de votar por Mitt Romney en un centro de votación de Nueva Orleans.
Pero "Obama está fuera de control. Realmente creo que es un musulmán encubierto", agregó, repitiendo teorías conspirativas que acechan a Obama desde su carrera hacia la Casa Blanca en 2008.
La tensión aumenta entre los precandidatos republicanos que buscan acercarse a Romney, cuyas 21 victorias incluyen Florida, Ohio y Michigan, estados clave para las elecciones generales.
En un hipotético duelo entre Obama y Santorum, el demócrata saldría con una ventaja de ocho puntos sobre su rival, aunque la misma encuesta arrojaba una paridad si el contrincante de Obama fuera Romney.
Pero Santorum asegura que la única forma de ganarle a Obama es designando a un candidato conservador que pueda dinamizar las bases del partido.
"Romney es un buen tipo, pero prefiero a Santorum porque siento que es mejor que el resto, al menos desde un punto de vista moral", dijo Dianne Cannelle, de 79 años, luego de votar en Nueva Orleans.
"No sólo hay que tener sesos para ser presidente; también hay que tener valores morales", agregó.
La participación fue baja hasta ahora en las elecciones primarias republicanas, pero Romney negó estar preocupado; la brecha que lo separa de los demás candidatos es cada vez más imposible de achicar.
Santorum prometió llevar adelante la batalla hasta la convención republicana en agosto en caso de que Romney no logre captar a los 1.144 delegados que necesita para ser designado.
Romney se ha asegurado por el momento 550 de los 1.144 delegados necesarios para lograr la investidura republicana para las elecciones presidenciales estadounidenses del 6 de noviembre.