Por Carlos Murcia
Periodista EL NUEVO SIGLO
La necesidad de que el país adopte un Plan de Desarrollo por la Paz fue puesta sobre la mesa por el exministro y dirigente conservador Juan Gabriel Uribe Vegalara, quien, de paso, recalcó que un triunfo mañana del presidente-candidato Juan Manuel Santos significaría un mandato categórico por la paz.
En entrevista con EL NUEVO SIGLO, Uribe Vegalara indicó que el Partido Conservador ha sido motor de la paz en Colombia y, por lo tanto, mañana debe demostrarlo en las urnas.
También replicó la tesis de la “mermelada” santista y el señalamiento según el cual el Presidente-candidato utilizó ‘politiqueramente’ el proceso de paz.
EL NUEVO SIGLO: ¿Cuál es su balance de esta campaña electoral?
JUAN GABRIEL URIBE V.:El balance ha sido el mismo de siempre, me parece que el hecho de que el país haya puesto sobre el tapete la guerra y la paz es muy importante. Lo que se plantea básicamente es un mandato por la paz y un referendo previo que, evidentemente, se vislumbra con claridad hacia quien ha llevado una política de paz como lo es el presidente Juan Manuel Santos.
ENS: Pero el expresidente Pastrana, de quien usted fue negociador en el Caguán, sostiene que Oscar Iván Zuluaga es el hombre de la paz y no Santos. ¿Qué responde?
JGU: El tema es que hay una política de paz, y la política de paz la tiene el presidente Santos. No conocemos muy bien la política de paz de Zuluaga. Se duró 20 días esperando a que expresara cuál era su política de paz, mientras que la política de paz del presidente Santos empezó a producir resultados.
ENS: Pero desde el uribismo se dice que Santos lo que hizo fue utilizar el proceso de paz como “bandera politiquera”…
JGU:No, creo que la paz siempre debe estar incursa en los procedimientos electorales, porque precisamente para eso es la democracia. Pensar que la guerra de Irak, o la guerra de Afganistán no iban a estar incursas en las políticas de los Estados Unidos, o en los procesos de paz estadounidenses, era estar por fuera de la órbita política. Desde luego la paz y la guerra, desde hace mucho tiempo, han estado incursas en los procesos electorales de Colombia.
Radiografía del proceso
ENS: ¿Usted, que es un conocedor de la paz, cree que realmente estamos ad portas del fin del conflicto?
JGU:Sí, creo que por primera vez se puede vislumbrar ese tema, obviamente con la cautela que ha tenido el Presidente. Hoy en Colombia no existe un mejor negociador que Juan Manuel Santos, ya que así como le dio muy duro a las Farc, tiene la capacidad e idoneidad para llevar a buen puerto el proceso de paz con las mismas Farc y también con el Eln, grupo con el que ha abierto una comisión exploratoria para lograr una paz integral.
ENS: ¿Cree que con el tiempo se unirán las mesas de negociación de las Farc y el Eln?
JGU:No creo que las mesas terminen unidas. Lo que sí creo que termine unida, desde luego, es la política de paz y, por lo tanto, un referendo único en torno a los temas acordados con una y otra guerrilla.
ENS: En caso de que gane la reelección el presidente Santos ¿qué sigue en el proceso de paz a partir del próximo lunes?
JGU:El presidente Santos, cuando anunció que buscaría la reelección, en noviembre pasado, fue muy claro en sostener que iba a ampliar el espectro político que soporta la paz y eso es lo que está pasando. Creo que mañana lo que pasará es, precisamente, que se va a generar un mandato por la paz, soportado en esa nueva coalición, que va de la centro-derecha a la centro-izquierda. Es decir, que se ha constituido en un centro político que va a soportar el proceso de paz.
ENS: ¿Cree que en diciembre Colombia ya tendrá la paz firmada?
JGU:Pues por lo menos el fin del conflicto creo que sí, pero el tema sustancial será el posconflicto, donde se necesitará la ayuda de todos los colombianos de buena voluntad que quieran cambiar el escenario político del país y que, desde luego, trabajarán a fondo en eso que el presidente Santos prometió cuando se posesionó, que fue un Nuevo Amanecer y me parece que ese Nuevo Amanecer está tomando muchos más bríos que antes.
ENS: ¿Colombia está preparada para el posconflicto?
JGU:El país tiene que buscar los mecanismos propios para el posconflicto. No puedo decir si está preparado o no, pero considero que dentro de sus propios resortes políticos y espirituales, dentro de sus capacidades económicas, con la ayuda internacional indudablemente, va a sacar avante el posconflicto. Y éste puede ser más importante que el mismo acuerdo de paz, porque en muchos países hubo acuerdo de paz y pero no un buen manejo del posconflicto.
De manera que lo que tiene que hacer Colombia es un buen manejo del posconflicto, que no será muy rápido, sino que exigirá varios años, objetivos e incluso un Plan de Desarrollo en ese propósito. Por eso el próximo Plan de Desarrollo tiene que llamarse “Plan de Desarrollo por la Paz” y debe tener un compromiso de varias vigencias futuras presupuestales y elementos por concretar.
Lo que viene
ENS: Si se reelige el presidente Santos ¿Con ese mandato por la paz habría cambios en la Mesa de Negociación?
JGU:Eso obviamente le corresponde al Presidente de la República, pero lo que es claro es que una vez se produzca el resultado electoral, lo que pasará es que habrá un ánimo por la paz en el país tal que será necesario convocar a todas las instancias posibles para que haya la mayor cantidad de participación.
ENS: ¿El Presidente citará a todos los partidos?
JGU:Claro, porque la sombrilla de la paz es hoy mucho más grande de lo que era hace dos o cuatro años. Se ha visto claramente cómo se han venido comprometiendo muchas más voluntades políticas de los diferentes sectores, no sólo de los políticos, sino también de los empresariales, sociales, culturales y sindicales. Y así es como se fabrica la paz en Colombia, de la base hacia arriba. Me parece que el gran resultado de estas circunstancias electorales es que se demostrará que se requiere una paz de base y que desde la base hay que trabajarla hacia arriba.
ENS: ¿El mensaje claro es que la paz no es de gobierno sino de Estado, porque todos están participando?
JGU:La paz es del pueblo. El tema de que la paz es de Estado y es una política de Estado no es tan cierto en la medida en que lo que exige la Constitución es que haya una paz, digamos, constitucional, que es la base de la Carta cuando dice que es un derecho y un deber de obligatorio cumplimiento. La Constitución de 1991 fue prevista como un Tratado de Paz y, por lo tanto, de hecho, tiene que ser un Tratado de Paz, tal y como lo señaló la Corte Suprema de Justicia de la época. De manera que mucho más allá de una política de Estado, lo que debe haber es un Tratado de Paz que convoque a todos los colombianos.
El Partido Conservador
ENS: ¿El Partido Conservador, qué papel puede jugar en todo este tema de la paz y las acciones del posconflicto?
JGU:La colectividad siempre ha jugado un papel fundamental en la paz en Colombia y ha sido una de las grandes animadoras de una política negociada. En esta ocasión no puede ser inferior a ese reto de buscar esa salida, cuando evidentemente es imperativa.
ENS: ¿El Partido Conservador se unificará después de las elecciones?
JGU:Hay que esperar que pasen las elecciones, pero el Partido Conservador siempre ha sido un partido que apoya la paz, es uno de los mandatos esenciales dentro de la doctrina conservadora. La paz es el bien supremo y la ha venido buscando en los últimos 30 años. Creo que el Partido tendrá que unirse en el tema de la paz y ese será el motivo central de la política contemporánea. Pero también el conservatismo es el que ha manejado la economía en los últimos años, especialmente en el mandato del presidente Santos y por eso, igualmente, tiene que colaborar en temas concretos de paz.
ENS: ¿Quedaron heridas por esta campaña presidencial en la colectividad?
JGU:En absoluto, hay unas tendencias políticas claras y concretas. Hay una tendencia del Partido Conservador que es una tendencia social, hacia la paz, del desarrollo con equidad y esa es la tendencia que ha venido acompañando al presidente Santos.
ENS: Pero la principal crítica a los conservadores con Santos es que están allí por la “mermelada”. ¿Su opinión?
ENS:En absoluto. El conservatismo ha tenido una responsabilidad gigantesca en la administración del presidente Santos, comenzando por todo el manejo económico, que ha sido muy bueno y que ha permitido que el país avance considerablemente en medio de la turbulencia económica mundial. De manera que no es cierto que pueda invocarse esa situación por estar el Partido Conservador en la administración Santos, mucho menos bajo esa tesis.
Si como decía el jefe nazi Hermann Goering, en torno a que se necesitaban más cañones y menos mantequilla, creo que se necesita mucho más inversión en las regiones. Pero desde luego, si se quiere cambiar el tema de los cupos indicativos presupuestales, se puede presentar un proyecto de ley de inmediato para esos efectos.
Objetivos inmediatos
ENS: Se viene un cambio del Directorio partidista, también del Presidente de esa instancia. ¿Cuál es esa labor fundamental que debe cumplir quien ocupe esa dignidad?
JGU:Lo más importante en el Partido es emitir un programa político con peso específico, una hoja de ruta a la cual uno se pueda unir programáticamente. Desde luego la doctrina conservadora es permanente en el sentido de que son unos postulados que sirven para cualquier instante político. Pero en este momento el Partido tiene que sacar avante lo que no sacó adelante la Convención Conservadora, que fue un programa político perfectamente claro y consensuado.
ENS: El sector que apoya al presidente Santos, del cual Usted es uno de los voceros, hizo diversos llamados en torno a que si ganan, invitarían a los conservadores zuluaguistas a que se unan. ¿Haría ese llamado?
JGU: La unión es obligatoria en la medida en que la bancada conservadora tiene que trabajar dentro de los criterios reglamentarios propios de una bancada partidista y, evidentemente, en ese sentido la unión será automática en el Parlamento, tanto en Senado como en Cámara, ya que tienen que actuar como bancada conservadora.
Pero lo que interesa más que los instrumentos, más que la mecánica, son los elementos puntuales programáticos emitidos por la próxima Convención Conservadora en torno a los propósitos nacionales, comenzando por el de la paz.
ENS: ¿Se sentaría a hablar con la excandidata Marta Lucía Ramírez?
JGU:Claro. Creo que todo el mundo está en ese propósito. Pero lo que interesa al Partido Conservador, como le dije, es que haya unos elementos programáticos, unos planes claros y no coyunturales. Ya le dije que el próximo Plan de Desarrollo debe ser un Plan de Desarrollo en torno de la paz, claro y concreto. Y llamarlo así: “Plan de Desarrollo por la Paz de Colombia” y, en ese sentido, el Partido Conservador tiene que colaborar programáticamente.
ENS:- Son muchos cambios y de fondo. Por ejemplo ¿Si se hace la paz se viene forzosamente una reforma tributaria?
JGU: Sí, ambos candidatos lo han dicho, pues evidentemente los colombianos no pensarán que es posible hacer un proceso de paz sin grandes inversiones, finalmente inversiones sociales. En ese sentido, se necesitan unos excedentes de capital para soportar esa paz, que obviamente generará réditos posteriores porque nada más fructífero y rentable para el país que la paz.