En medio  de un debate jurídico y político, hoy la plenaria del Concejo de Bogotá deberá resolver la elección de Contralor y Personero de la ciudad.

El domingo se vence el periodo del actual contralor Diego Ardila y el 29 se vence el periodo del personero Ricardo Cañón.

Tal como lo dijo el lunes EL NUEVO SIGLO, la contralora auxiliar Ligia Botero asumiría como encargada en la Contraloría, designación que no está exenta de cuestionamientos, pues fue quien investigó el sistema de aseo que implantó el exalcalde Gustavo Petro.

El presidente del Concejo, Roberto Hinestrosa, de Cambio Radical, expidió una resolución convocando a las inscripciones de candidatos y estableciendo un examen habilitante para los aspirantes a los organismos de control que deberá entregar la hoja de vida entre lunes y martes con un plan estratégico del organismo al cual aspiren.

El concejal Antonio Sanguino, copresidente de la Alianza Verde, dijo que “ojalá este proceso, también, sea el resultado de un consenso de las distintas fuerzas políticas, de tal suerte que Bogotá cuente con un contralor y un personero que ejerzan las labores de control fiscal y disciplinario con carácter, con diligencia pero también con los más altos estándares técnicos y éticos”, anotando que deben ser “un contralor y un personero que no sean una piedra en el zapato para el Gobierno distrital, pero que tampoco tengan las rodilleras puestas ante la administración”.

Sanguino le reclamó a la mesa directiva del Concejo que de manera urgente cumpla el Acuerdo 635 de 2016 y expida de manera inmediata los actos administrativos que permitan clarificar el proceso eleccionario tanto del personero como del contralor  distritales.

“La elección de personero y contralor debe estar acompañada de los más altos estándares meritocráticos, de tal suerte que tengamos la certeza y seguridad de que estos dos organismos de control queden en manos limpias y competentes”, advirtió Sanguino.

El dirigente verde afirmó que hay que evitar a toda costa que la elección de personero y  contralor como en muchas ocasiones ha ocurrido, “sea el producto de una repartija clientelista entre los partidos con asiento en el Concejo de la cuidad o entre quienes se consideran con el derecho natural de elegir la cabeza de estos dos órganos de control”.

Para el miércoles estarían los nombres de los inscritos a cada uno de esos organismos debido a que no hay claridad ante el favoritismo, aunque el exgobernador boyacense Juan Carlos Granados sería el más fijo en la Contraloría debido a que es la ficha de Germán Vargas Lleras.

Para el cargo de Personero suena Luis Gustavo Moreno, pero hay que esperar la lista de inscritos para ver cómo se mueven los partidos de la coalición mayoritaria en la elección de los dos jefes de entes de control.