Liberación de Mubarak ordenan en medio de violencia egipcia | El Nuevo Siglo
Miércoles, 21 de Agosto de 2013

Un tribunal egipcio ordenó el miércoles la libertad condicional del expresidente Hosni Mubarak, derrocado en 2011 por una rebelión popular, creando nuevos factores de tensión en un país sacudido por la caída de su sucesor islamista Mohamed Mursi y una ola represiva que en una semana dejó más de mil muertos.

Se ignora si el gobierno instalado por los militares cumplirá el dictamen judicial, pero incluso si lo hace, el hombre que gobernó Egipto con mano de hierro durante más de tres décadas aún tiene que dar explicaciones a la justicia por denuncias de corrupción y de asesinato de manifestantes, con una primera comparecencia el próximo domingo.

La fiscalía general deberá decidir, probablemente el jueves, si libera a Mubarak o si lo mantiene en detención preventiva "por otros cargos", indicó el miércoles por la noche el ministerio del Interior.

El nuevo régimen asestó el miércoles nuevos golpes a los partidarios de Mursi con las detenciones de Safwat Hegazy, un influyente predicador, y Murad Ali, portavoz del Partido de la Libertad y la Justicia (PLJ), vitrina política de los Hermanos Musulmanes, la cofradía del mandatario depuesto.

La jornada del viernes podría ser una prueba de la capacidad de movilización de los Hermanos Musulmanes. Los pro Mursi convocaron grandes manifestaciones para el "viernes de los mártires".

Pero el régimen se vio sometido a presiones externas por la decisión de la Unión Europea (UE) de suspender la venta de armas y de material de seguridad a Egipto, debido a la férrea represión.

Los 28 países miembros de la UE decidieron "suspender las licencias de exportación de todos los equipos que puedan ser utilizados en la represión interna", según el documento de conclusiones de la reunión de ministros de Exteriores del bloque en Bruselas.

Desde el golpe que el 3 de julio derrocó a Mursi, las fuerzas de seguridad decretaron el estado de emergencia y detuvieron a miles de simpatizantes de los Hermanos Musulmanes, incluyendo a su Guía Supremo, Mohamed Badie, capturado el martes.

Y el 14 de agosto dispersaron brutalmente dos campamentos islamistas instalados en plazas de El Cairo desde hacía más de un mes. La intervención, duramente resistida, dejó un saldo de más de 600 muertos en el día más sangriento de la historia reciente de Egipto.

El balance aumentó en los días siguientes a más de mil muertos, incluyendo a 37 islamistas que se hallaban detenidos y que según las autoridades habían protagonizado un intento de fuga.

Las fuerzas de seguridad perdieron por su lado el lunes 25 efectivos en un atentado con cohetes en la península del Sinaí. En total 45 uniformados murieron en los últimos días en esa región, limítrofe con la franja de Gaza.

AFP.