La calentura no está en las sábanas: Pastrana | El Nuevo Siglo
Viernes, 16 de Diciembre de 2011

El ex presidente Andrés Pastrana, reaccionó a la visita del DNC al pabellón de la cárcel La Picota, donde están reunidos algunos sindicados y condenados del Partido Conservador. En el día de ayer la ex ministra Martha Lucía Ramírez y el ex senador Juan Gabriel Uribe advirtieron sobre la inconveniencia de la visita como un mensaje totalmente adverso para la renovación conservadora. El siguiente texto de la carta del ex presidente Andrés Pastrana:

 
Doctor
EFRAÍN CEPEDA SARABIA
Presidente
Directorio Nacional Conservador
Vía Fax
 
 
Estimado señor Presidente:
 
Desde su llegada al turno de la Presidencia del Directorio Nacional he seguido con especial interés el rumbo del Partido tras su fracaso electoral. Las maromas aritméticas para justificar lo injustificable y su apabullante silencio ante la corrupción de las directivas han puesto de presente la gravedad de la enfermedad conservadora.
 
Cuando el país pensó que había visto todo con un presidente de Directorio Conservador ligado a un motel de la mafia y a una notaría, atento al saqueo del Estado, sucedió lo impensable. El Partido Conservador, en cabeza de sus directivas, decide hacer un homenaje al narcoparamilitarismo y sus adláteres de la política, por encima de los muertos, la sangre, el dolor y la vergüenza nacional.
 
Dice el proverbio chino que el pez se pudre por la cabeza. El anuncio de una peregrinación y convite en La Picota deja en claro y de manera desafiante el norte de las directivas del Partido Conservador. Con este gesto público, con esta venia a una de las empresas criminales más crueles de la historia de la Humanidad, los directores conservadores han develado algo tenebroso, concertado y de largo alcance, a lo que se aferran contra viento y marea.
 
La verdad verdadera no puede disfrazarse con figuras ilustres entretenidas entre incisos y discusiones académicas en aras de una supuesta reingeniería. La verdad está en los gestos y en los hechos, independiente de convenciones y aquelarres. La verdad conservadora es que el Partido es enfermo grave y que la calentura no está en las sábanas.
 
Hoy, al margen de la política activa, mi relación con el Partido Conservador es apenas ocasional y unilateral. Es una vieja amistad con la que, en las horas difíciles, me quedo a su lado para hablarle con cariño. Aún cuando prefiriera estar en otra parte, como diría alguien.
 
A la dirigencia de mi partido le he dicho que debe tener un mínimo de pudor republicano ante delitos protuberantes y que los protagonistas de éstos deben renunciar. Le he pedido que si va a hacer política con los Diez Mandamientos, no olvide 'No robar'. Le he aconsejado que, antes de entrar en asuntos doctrinales y mecánicos, conforme un magno Tribunal de Ética para someter a él a quienes arrastran por el lodo el buen nombre del Partido. He advertido que los parapolíticos son, ante los ojos del mundo y de nuestros partidos afines, cómplices de grupos terroristas. Palabras de viejo amigo.
 
Con estas reflexiones de fin de año no me queda más que expresarle mis mejores deseos de bienestar y felicidad con su familia en esta Navidad y Nuevo Año.
 
Muy cordialmente,
Andrés Pastrana, 
Ex presidente de Colombia.